En los hospitales públicos de la Ciudad de Buenos Aires, la demanda de vasectomías creció un 40 por ciento entre 2018 y 2019. Tendencias similares o incluso mayores de incremento se observan en otros centros de salud como los hospitales de Clínicas –78 por ciento más de un año a otro--, el Posadas, en El Palomar, y la Maternidad Estela de Carlotto, de Moreno, en el conurbano bonaerense --de acuerdo a un relevamiento realizado por este diario --, donde la novedad, además, es que están pidiendo este método anticonceptivo jóvenes sub 25, e incluso menores de 20, que no han sido padres y expresan que no tienen deseo de paternar. “Vienen rebotados de otros efectores, donde no se la quieren hacer por su edad, y lo dicen muy claro: no quieren ser padres”, señaló a Página|12 el director de la Carlotto, Eduardo Daniel Fernández.

El aumento más significativo, coinciden especialistas consultados por este diario, se dio a partir del debate del aborto, en el Congreso, a mediados de 2018, en el que se habló ampliamente de anticoncepción y salud reproductiva, sumado a que se empezaron a difundir folletería e información en redes, que ayudaron a derribar mitos en torno a esa intervención. Otro dato significativo: Las consultas al 0800-222-3444 de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud de la Nación, sobre vasectomías crecieron un 40 por ciento en el último año: de 580 llamados en 2018 se pasó a 817, en 2019. Por segundo año consecutivo, las llamadas para averiguar sobre vasectomías superaron a las que buscaban información sobre ligaduras tubarias (ver cuadro aparte). Un objetivo en la provincia de Buenos Aires será promover esta práctica e incorporar a los varones a los servicios de salud reproductiva, adelantó la encargada del programa en el ámbito bonaerense a este diario, Carlota Ramírez.

Las razones de Pedro

“Soy promotor de la vasectomía”, se presenta Pedro, ante Página|12. Es periodista, vive en el barrio porteño de Palermo y se hizo la anticoncepción quirúrgica el año pasado a través de su prepaga, en una clínica privada. “A lo largo de mis 43 años tuve dos abortos y dos embarazos, el primero no buscado, a los 20. Estoy decidido a no tener más hijos. Lo tengo claro. Es un posicionamiento honesto”, dice, para explicar su decisión. La primera vez que consultó con un urólogo sobre el procedimiento, en 2018, se arrepintió tres días antes de la intervención porque –reconoce-- estaba empezando una relación amorosa que pensó podía prosperar y ella, más joven, no tenía hijos. Pero a los seis meses, después de que el vínculo se cortó, ya estaba arrepentido de haberse arrepentido. Y no dudó más. Pedro es uno de los tantos varones que se están animando a la vasectomía. Cada vez son más, aunque todavía las cifras son pequeñas, y en la Argentina no se registran los números de países desarrollados, donde superan incluso los porcentajes de ligaduras tubarias.

En los hospitales públicos porteños se pasó de 10 vasectomías en 2017, a 56 en 2018 y 78 en 2019. Las prácticas se concentran en un 90 por ciento en los hospitales Pirovano, Tornú, Argerich y Rivadavia, informó a este diario el titular del programa de Salud Sexual y Reproductiva de la Ciudad, Fabián Portnoy. Son cifras muy bajas todavía, en relación con las de ligaduras tubarias --1709, 1833 y 2087, respectivamente, en los tres últimos años-- pero la tendencia, claramente, es al aumento. De todas formas, los datos oficiales no incluyen las prácticas en el sector privado ni en centros de obras sociales, aclaró Portnoy.

Fabián Portnoy, titular del programa de Salud Sexual y Reproductiva de la Ciudad.

El interés, sin dudas, es creciente: en el primer semestre de 2019, la vasectomía, se convirtió en el tercer motivo de consulta entre las personas de la ciudad de Buenos Aires que llaman al 0800-222-3444 de salud sexual y reproductiva del Ministerio de Salud de la Nación, después de los métodos anticonceptivos (382 llamadas) y el aborto (215). Por la esterilización masculina se hicieron 84 consultas.

Cada vez más jóvenes

En el Hospital de Clínicas, que depende de la UBA, se hicieron 68 vasectomías en 2019, un 78 por ciento más que el año anterior, cuando se practicaron apenas 38. “La demanda se incrementó especialmente desde el debate del aborto. Ya venía en aumento pero fue una explosión de consultas a partir de ese momento. Lo veo tanto en el consultorio del hospital como en el privado”, contó a este diario la médica uróloga Florencia Fulco, del Clínicas, y precisó que reciben dos tipos de pacientes:

--Varones de cuarenta y pico, que tiene una familia consolidada, y un segundo grupo, que es el más polémico, que son jóvenes, de 17, 18, 20, 21 y 22 años que vienen a pedir la vasectomía. En general están todos súper informados sobre cómo es el procedimiento y saben que en la mayoría de los casos no es reversible –contó.

En 2019, en el Hospital de Clínicas se hicieron 12 vasectomías a menores de 25 años.

--A los de 17 años, no se las hago. Les explico que hay otros métodos y que si siguen firmes en su postura, vuelvan a los 18 y se la hacemos. Todos vienen con el discurso de que no quieren tener hijos, que el mundo tiene demasiada gente… Ahora ya no pregunto tanto. Tampoco tenemos que indagarlos.

En realidad, el Código Civil y Comercial y una resolución ministerial, establecen que se puede pedir la vasectomía desde los 16 años, sin autorización parental ni judicial, aclararon a este diario desde el Programa Nacional de Salud Sexual y Reproductiva (ver aparte).

--¿Se puede revertir la esterilización? –le preguntó este diario a Fulco.

--Hay técnicas descriptas de reversibilidad. Pero en general es irreversible. Creemos que nos van a llegar después pedidos de reversión, cuando estos jóvenes armen parejas nuevas. De todas formas, no significa que no vayan a poder tener hijos con tratamientos de fertilización asistida.

Lista de espera

En la Maternidad de Moreno Estela de Carlotto, en la provincia de Buenos Aires, empezaron a realizar vasectomías en 2015: “Fue un proyecto del Ministerio de Salud de la Nación, que mandaba un urólogo una vez por semana. Pero con el macrismo eso se cortó y luego, pedí el nombramiento de un especialista, que empezó a trabajar en noviembre de 2018. Desde entonces y a lo largo de 2019 llevamos realizadas 188 vasectomías. En 14 casos, fueron hechas a menores de 24 años, varios de ellos sin paternidad. Uno tenía 19 años. Y a 39, que tenían entre 25 y 29 años”, reveló a Página|12 el director de la Maternidad, Eduardo Daniel Fernández.

--A los más jóvenes les ofrecemos un espacio de escucha con un equipo interdisciplinario, pero en general no les interesa. No quieren ser padres. Es muy claro. A veces, vienen rebotados de otros efectores.

En la Carlotto, tienen una lista de espera de entre 40 y 50 personas y están dando turnos para principios de abril.

En el Hospital Posadas, de El Palomar, la demanda se incrementó también a partir de 2018. Un factor que estiman tuvo que ver, además del debate del aborto, fue un video que protagoniza el médico residente de urología Diego Apala, que se difundió en redes, donde cuenta que se trata de una práctica con anestesia local y sin bisturí, lo que marca que en la medida que se difunde y se conoce, el método logra más adeptos. Pero como es un hospital de alta complejidad, priorizan cirugías oncológicas, y están realizando solo dos vasectomías por sábado. Tienen lista de espera de alrededor de un mes, contó a este diario el propio Apala. “Incluso el personal del mismo hospital se la quiere hacer”, comentó.

Es gratuita

Desde 2006, la anticoncepción quirúrgica también forma parte del Programa Médico Obligatorio (PMO) con cobertura total, es decir, que las obras sociales o prepaga deben cubrir el 100 por ciento de la práctica (Resolución 755/2006). En caso de no poder dar respuesta a la demanda, los servicios de salud deben garantizar la derivación oportuna a un efector de salud en donde sea posible realizar la práctica, informan desde el Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable. Pero lo cierto es que en algunas jurisdicciones, como en la ciudad de Buenos Aires, recién hace pocos años empezó a ofrecerse y a difundir folletería con información.

En los hospitales públicos de la CABA es posible realizar la intervención.


¿Cómo se hace la vasectomía?

La intervención es ambulatoria, con anestesia local o pequeña sedación, explicaron los especialistas. El procedimiento puede durar 40 minutos o menos, y a las dos horas la persona ya se puede ir a su casa, explicó Fulco. Con dos pequeñas incisiones, se busca los dos conductos deferentes, se los liga, y corta por separado. Así los espermatozoides quedan en los testículos y no llegan al semen. Hay varias técnicas.

--No sentí absolutamente nada –cuenta Pedro, sobre la cirugía. A él se la hicieron en la guardia del Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento, en Palermo--. Cuando abrí los ojos, me pasaron a una camilla y me llevaron a una sala, hice media hora de siesta y me fui a mi casa caminando. Me acompañó un amigo. Algunos conocidos que se operaron también le han contado que sintieron algún dolor en la zona, pero no ocurrió en su caso.

--¿Sentiste cambios en tus relaciones sexuales, por ejemplo, un aspecto sobre el cual siempre hubo muchos mitos? –le preguntó este diario.

--Mis relaciones no cambiaron absolutamente en nada. Es una estupidez pensarlo. Creo que es tirano que la prevención del embarazo recaiga siempre sobre la mujer, con pastillas, DIU u otro método.

--¿Dejaste de usar preservativo una vez que te hiciste vasectomía?

--Aspiro a no tener que usarlo cuando vuelva a tener una relación estable. No te voy a negar, que alguna vez no me cuidé. Sé que no hay que hacerlo pero algunas veces no usé preservativo –reconoció.

Ese puede ser un riesgo: al no tener el riesgo de embarazar, descuidar el cuidado para prevenir infecciones de trasmisión sexual. La vasectomía, vale remarcar, no las previene. Y solo puede protegerse con preservativo.

Derribando mitos

Maxi Hermosilla tiene 37 años, y está en pareja hace 12 con una mujer, con quien tuvo a sus dos hijas, una de 6 y otra de 2 y medio. Es diseñador gráfico y director creativo en una agencia de publicidad y vive en Luis Guillón, en el conurbano bonaerense. Se hizo la vasectomía en 2018. “Después de charlarlo con mi compañera e interiorizarme sobre el tema, decidí operarme”, contó a este diario. También pesó en él sacarle la responsabilidad de la anticoncepción a su pareja. Su decisión incentivó a dos amigos, con dos hijos cada uno, a hacérsela y hay un tercero, que también tiene hijos, que los va a seguir. Pero otros amigos, sin prole, consultaron a un urólogo –contó—y como todavía no habían sido padres, no quisieron practicársela.

Maxi Hermosilla. Imagen: @_aleugarte.

--¿Cambió en algo tu vida sexual después de la vasectomía?

--En cuanto a sensaciones, libido, erecciones, placer, no me cambió nada. Y tampoco afectó en nada el ritmo sexual –se preocupa por aclarar y desmitificar falsas creencias que sobrevuelan al método.

En la provincia de Buenos Aires no tienen sistematizada la información sobre vasectomías practicadas en todos los hospitales, señala a Página|12 la encargada del programa bonaerense de Salud Sexual y Reproductiva, Carlota Ramírez. Todas las regiones sanitarias no les han mandado la información aún, indicó. “Hemos hablado con los efectores y nos han comentado del aumento de la demanda. No es sorprendente por el impacto que ha tenido el feminismo en estos últimos años. Una de nuestros objetivos va a ser incorporar a los varones a los servicios de salud sexual y reproductiva y ofrecerles vasectomía. Tenemos que trabajar muy fuerte en eso”, apuntó Ramírez.