Luego de casi 24 horas de incertidumbre
, se dieron a conocer los primeros resultados de los caucus de Iowa, Estados Unidos. Con el 62 por ciento del conteo realizado, el exalcalde de South Bend, Pete Buttigieg, se imponía en la interna demócrata, alzándose con el 26,9 por ciento de los delegados. Le seguían Bernie Sanders, favorito en Iowa, con 25,1 por ciento de los votos. Más atrás quedaron la senadora Elizabeth Warren con 18,3 por ciento, y el gran perdedor de la noche, el exvicepresidente Joe Biden, con apenas un 15,6 por ciento. Los resultados de los caucus de Iowa se retrasaron por fallas técnicas en la aplicación informática utilizada para el recuento. Si bien venía creciendo en las últimas encuestas, el buen desempeño de Buttigieg resulta una novedad para el escenario político estadounidense, ya que se trata del primer precandidato abiertamente homosexual en triunfar en primarias. Fiel a su estilo, el presidente Donald Trump, que se aseguró una pronosticada victoria en la interna republicana el mismo lunes, aprovechó la demora en el conteo para burlarse de los demócratas.
Con el 62 por ciento de los votos escrutados, Pete Buttigieg alcanzaba una excelente performance. Veterano de guerra de 37 años, homosexual y felizmente casado, el hasta hace unos meses desconocido alcalde de South Bend, Indiana, busca liderar el voto joven para vencer a Donald Trump. Este joven hijo de inmigrantes luchó además en la guerra de Afganistán y se formó en Harvard y Oxford.
"El momento que vivimos exige voces esperanzadoras y audaces de comunidades como la nuestra. Y sí, exige una nueva generación de liderazgo", aseguró Buttigieg en su acto formal de presentación de campaña, ante 6 mil seguidores. Apenas se dieron a conocer los primeros resultados del caucus, el joven precandidato destacó: "No importa lo que suceda después, esto es innegable y representa una asombrosa victoria para esta campaña, esta candidatura y esta visión de la que todos ustedes han sido parte".
En la vereda opuesta, el exvicepresidente Joe Biden, uno de los favoritos a nivel nacional, tuvo un flojo desempeño, sumando un 15,6 por ciento y ubicándose cómodo en el cuarto lugar entre los precandidatos. Antes de conocerse los primeros resultados, Biden se había mostrado molesto con las demoras, exigiendo al respecto "una explicación completa e información relevante sobre los métodos de control de calidad que se están utilizando para el recuento".
Por su parte, el senador demócrata Bernie Sanders, que iba primero en las encuestas en Iowa, se ubicaba en segundo lugar con el 25,1 por ciento. En la misma línea de Biden, Sanders ironizó ante sus seguidores sobre la confianza en que el partido publicaría los resultados "en algún momento". Con marcado optimismo, el equipo de Sanders había difundido en las horas previas cifras internas que representaban supuestamente a un 40 por ciento de los votos escrutados, y le daban la victoria con más del 30 por ciento de las preferencias.
Probablemente, y sin competir, el multimillonario exalcalde de Nueva York (2001-2013), Michael Bloomberg, se vio favorecido con los resultados, considerando que sus grandes rivales en la carrera electoral (Sanders, Warren, Biden) no tuvieron una gran jornada. Bloomberg, que no participó en las primarias de Iowa y tampoco lo hará en las próximas de New Hampshire, se presenta como un candidato moderado poseedor de una "condición única" por su "experiencia en los negocios, gobierno y filantropía". El magnate estadounidense tuvo un notable crecimiento en las últimas encuestas nacionales, donde ya ocupa el cuarto lugar.
Una falla en el sistema
La confusión y las demoras en el escrutinio del caucus demócrata de Iowa empañaron el inicio de las primarias del partido. El origen del problema estuvo en una irregularidad en la aplicación informática desarrollada para divulgar los resultados de las cerca de 1.700 estaciones de votación. Los caucus comenzaron a las 19 horas del lunes, y habitualmente los resultados se conocen al cabo de unas pocas horas. Pero no fue el caso y hubo que esperar prácticamente 24 horas para conocer las primeras cifras oficiales.
Donde no quedaron dudas de los resultados fue en la interna del partido republicano. El mismo lunes se supo que Trump salió victorioso de los caucus de Iowa con un 97 por ciento de respaldo. El mandatario no se enfrentó a ningún rival significativo: el exgobernador de Massachusetts Bill Weld y el excongresista de Illinois Joe Walsh pudieron arrebatarle apenas algunas décimas.
Trump aprovechó la ocasión para burlarse de los demócratas. "Los caucus demócratas son un desastre total; nada funciona, igual que cuando gestionan el país", expresó en Twitter. El mandatario espera ser absuelto este miércoles del juicio político impulsado por los demócratas.