En el video de Lobas, cada mirada cuenta una historia: célebres o anónimas, todas las mujeres que aparecen en este himno que Vaio Flow le dedicó al movimiento feminista tienen su fuerza propia, aunque en manada aúllan más fuerte. “Es muy importante para mí esa canción; y si la hice como un trap y me apropié de eso fue para darle mi contenido: ese tema es como un regalo para el movimiento feminista”, dice Violeta Kovensy, la rapera categoría 1990 que tomó el desafío de apropiarse del trap para introducir un mensaje muy distinto –incluso opuesto– al que en general bajan algunos guarangos y bananas representantes de ese estilo.

 

Acompañadas por Cristina Banegas, Marta Dillon o sus propias amigas y compañeras de militancia, Vaio Flow y sus lobas no amenazan ni piden nada: salen a la búsqueda de lo que les corresponde. Tú crees que sirvo para la cocina / pero soy más fuerte que el huracán Katrina, rima Violeta, quien también encuentra esa actitud machista en el ámbito musical: “Me pasó de conocer a raperos que como personas son increíbles, pero sus letras son horrendas. Es un misterio, pero pasa”.

Luego de varios viajes para tocar y grabar por Latinoamérica y Europa, Vaio Flow (que también es productora audiovisual y le debe su apodo a Miss Bolivia) tiene ya listo SUMMA, un EP de cuatro temas históricos, que se plantan en la igualdad de género pero también con el autocultivo o contra la represión, como en Velas y balas, un funky en el que participa la guatemalteca Rebeca Lane.

Como tantos talentos de su generación, Vaio empezó a rapear junto a Marcos Miranda, el ineludible Núcleo aka TintaSucia: “Hace 10 años les hice el video de Somos a La Conección Real, cuando tenía 18 años y ni sabía usar una cámara. Lo respeto mucho y fue muy importante en mi vida de rapera. Escucho raperos actuales de los que no comparto para nada su contenido misógino y machista, pero capaz que los admiro por el flow que tienen, por su actitud o su música“.

En La nota justa, producida por el español R. Bravo, Vaio describe lo difícil que es ser una loba: “Los pibes cuando los conocés te dicen que está todo bien y que bancan tu carrera artística, pero cuando te tenés que quedar hasta las 4 de la mañana grabando un tema en Longchamps empiezan los reclamos. No conocí aún a alguien que te banque eso. Si estás conmigo tenés que entender que a veces voy a estar en otra provincia, en otro país o en la villa rapeando con los pibes, porque eso es lo que hago. Y lo odian. Quiero mi libertad, quiero mi espacio y poder desarrollarme más allá de los egos, sin que me persecuteen”.

 

Freekytown, el tercer tema del disco, tiene que ver con otro asunto que me preocupa mucho y me atraviesa, que es el tema de la despenalización del cultivo y el consumo de cannabis. Yo trabajo bastante en el rubro con growshops y somos algunos de los que ponemos las manos y el cuerpo y arriesgamos nuestra vida y nuestra libertad por eso”, se planta la cantante. Estamos chinos y balas nos dan/ Plantamos flores y nos persiguen mal/ Nuestra condena es nuestra libertad, canta Vaio Flow en ese tema.

Kovensky también es vegana: “Es importantísimo para mí porque es revolucionario, pero no soy activista incisiva, sino que lo hago por mí. No me olvido ni de ese tema ni de la despenalización ni de la trata ni de la minería a cielo abierto”, dispara esta joven loba con las cosas bien claras. “No soy un bicho de competencia. Una vez sola lo hice y aunque no me fue tan mal, no me sentí cómoda. He compartido horas y horas haciendo freestyle en modo amigable pero no me entusiasmó competir porque me parecía entre gracioso y decadente, por lo menos en su momento. Ahora capaz que está mal visto ser un pelotudo”.

* Vaio Flow toca el miércoles 5 a las 20 en La Tangente, Honduras 5317, junto a La Movida y La Casa del Fuego.