El ministro de Producción, Francisco Cabrera, reconoció ayer que el programa de Precios Transparentes no funciona para incentivar el consumo. El Gobierno había modificado las condiciones del plan de créditos a tasa fija Ahora 12 y eliminado las cuotas sin interés, por uno en el que se buscó beneficiar la compra de contado, lo que debería haber implicado una baja en los precios en el caso del pago en efectivo. “Los precios bajaron menos de lo que esperábamos”, aseguró el funcionario, quien vinculó el mal desempeño de la iniciativa a cuestiones “psicológicas”.
Las cámaras comerciales venían denunciando hace varias semanas que los cambios en el programa que eliminó las cuotas sin interés habían perjudicado las ventas. En su último informe mensual, la Confederación de la Mediana Empresa (CAME) denunció una caída de las ventas minoristas del 4,1 por ciento, debido, entre otras causas, al impacto de Precios Transparentes.
“Esperábamos que los precios de contado bajaran más”, insistió Cabrera en declaraciones radiales. Según dijo, el resultado, lejos de una baja generalizada al público, “fue 50 y 50”; es decir que algunos bajaron y otros no. “Es como un tema psicológico. “Como que se rompió la magia, todo el mundo sabía que le estaban cobrando interés en las cuotas, pero se querían autoengañar, querían pensar que no le estaban cobrando”, justificó el funcionario el fracaso del plan.
De todos modos, reconoció que en la primera semana de vigencia del programa “hubo caída del consumo, mientras que la segunda también hubo caída de las ventas financiadas”. El ministro buscó justificar el fracaso de la medida en otras promociones que lanzaron los comercios para vender más en un contexto de consumo congelado. “Ahora aparecieron cincuenta cuotas, que es algo positivo y que nunca podían haber aparecido con la forma anterior (el programa Ahora12), porque había que subir el precio al doble”, aseguró Cabrera.