La empresa Nike confirmó que se va del país, pero la marca seguirá a cargo del Grupo Axo, un operador y distribuidor de primeras marcas en América Latina. Lo mismo ocurrirá en Brasil, Chile y Uruguay. Nike indicó que estos cambios forman parte de la transición del modelo de negocio, que tienen como objetivo “desarrollar un esquema más rentable, eficiente en capital y de mayor valor agregado”. El Sindicato del Calzado se encuentra en alerta por los 700 trabajadores de las dos fábricas que ensamblan calzado para Nike. “Tememos que empiecen a traer todo importado y terminen con la fabricación local”, indicó a PáginaI12 Agustín Amicone, secretario general del sindicato. El martes pasado mantuvieron una reunión con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, para informar la situación y consideran que la “llave” del conflicto la tiene el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. a quien le solicitaron una reunión. “Nuestra propuesta es que tiene que haber cuotas razonables de importación y que hay que priorizar a productores locales, no a quienes ponen una cadena comercial y se dedican a importar”, aseguró Amicone.
Partida
La noticia sobre la partida de Nike es conocida desde hace varios días por sus trabajadores. Pero recién este jueves la empresa lo confirmó a través de un comunicado. Consideran que la alianza con dos grupos económicos, tanto en los locales como en el comercio digital, impulsará el crecimiento de la compañía. “Mantenemos el compromiso de servir a los consumidores de estos países con lo mejor de la innovación en productos y servicios, y aprovechar estas alianzas para fomentar un crecimiento sostenible y rentable”, indicó el documento. Sin embargo, como resultado de las transacciones, Nike registrará una pérdida de alrededor de 425 millones de dólares.
Cuando se complete la transición, que se estima será a mitad de año, las operaciones en Argentina, Chile y Uruguay quedarán a cargo del Grupo Axo. Se trata de un operador y distribuidor, con derechos de distribución para más de 30 marcas en México y Chile, con marcas como Tommy Hilfiger y Calvin Klein. Por su parte, en Brasil Nike pasará a manos del Grupo SBF S.A., que opera la marca “Centauro” y la mayor cadena minorista de artículos deportivos en Brasil y en toda América Latina.
La transacción de Grupo Axo está sujeta a la aprobación del gobierno local y la transacción de Grupo SBF depende de las aprobaciones de la Autoridad Antimonopolio de Brasil. Además, Nike aclaró que la relación con atletas, clubes y federaciones se mantendrá sin cambios. Hasta el año pasado, Nike era sponsor del club Boca Juniors, relación que se mantuvo desde 1996.
Preocupación
En el sector del calzado hay “mucha preocupación”. Es que Nike compra parte de su producción en la fábrica Dass, ubicada en El Dorado, Misiones, y en Suola, en Villa Soldati, en la Ciudad de Buenos Aires. En ambas se realiza el ensamblado de mercadería importada y en total emplean a 700 trabajadores. “Tememos que con estos cambios Nike pase a un modelo importador y se queden las personas en la calle”, indicó a PáginaI12 Agustín Amicone, del sindicato del calzado.
El martes pasado mantuvieron una reunión con Moroni para encender las alertas. “En los noventa, el primer licenciatario de Nike fue Alpargatas, y luego lo abandonaron cuando empezaron a importar. Luego en 2005 trajeron el trabajo de ensamblado cuando se regularon las importaciones”, recordó Amicone. Si bien teme por los puestos fabriles, considera que los empleados de comercio de los locales físicos no sufrirán ningún cambio. “Las ventas van a seguir porque no se van a perder de facturar 7 millones de pares por año”, indicó.
Por la baja en las ventas, la fábrica de El Dorado , pasó de 1400 trabajadores en 2015 a alrededor de 300 en 2019. En su plenitud, la planta producía 22 mil pares de calzado por día, y esa cifra apenas supera los 9 mil.