Este fin de semana, agentes de las áreas de control municipal efectuaron procedimientos preventivos en las zonas con mayor concurrencia. Se registraron 16 casos de alcoholemia positiva, uno de ellos con un índice de 2.17 gramos.

La Secretaría de Control y Convivencia municipal llevó adelante intervenciones preventivas y de control vehicular nocturnas en las zonas con mayor circulación de la ciudad. Tal como se realiza cada fin de semana, agentes de las áreas de control, en colaboración con la Policía de Rosario, llevaron a cabo controles de las condiciones de conducción y de elementos de seguridad viales.

De acuerdo a lo que precisó la secretaria Carolina Labayru, entre la noche del jueves pasado y este domingo a la madrugada, se concretaron procedimientos en distintos puntos de Rosario a fin de promover condiciones seguras y ordenadas en el tránsito. En este marco se remitieron al corralón 38 vehículos, 16 de ellos porque sus conductores dieron positivo el test de alcoholemia. Cabe mencionar que el nivel más alto registrado fue de 2.17 gramos.

El resto de los traslados al depósito municipal son por irregularidades en la tenencia de documentos y elementos de seguridad que son obligatorios para la circulación.

El sábado a la noche, la Secretaría de Control y Convivencia efectuó junto a Gendarmería Nacional un operativo especial en Colombres al 1700. El objetivo fue controlar las condiciones de conducción entre conductores que arribaban a la ciudad, procedentes de la zona de las islas donde había tenido lugar una fiesta.

 

De acuerdo a los datos oficiales, durante esta intervención que alcanzó 47 controles, se detectaron 7 conductores con niveles de alcoholemia en sangre incompatibles con la conducción segura, 6 de los cuales superaron o estuvieron muy cerca del gramo de alcohol en sangre. El registro más alto fue de 1.56 gramos; el resto fue de 1.28, 1.10, 1.19 y hubo dos casos de 0.95 gramos.