Desde Santa Fe
El gobierno de Omar Perotti metió más presión política a la Legislatura al advertir sobre la crisis fiscal de la provincia y su impacto en los municipios y comunas. El ministro de Gestión, Rubén Michilig, describió ayer los dos escenarios que se plantean en la Casa Gris. Si el Senado y la Cámara de Diputados aprueban la ley de Necesidad Pública que propuso el gobernador, el artículo 29 autoriza a crear un Fondo de Asistencia Financiera a gobiernos locales con más de 3.000 millones de pesos para que éstos puedan “afrontar la política salarial, la prestación de servicios esenciales, situaciones de emergencia social, cancelación de deudas o inversión real directa”, dice la norma. ¿Y si la ley no sale? “Viviremos una situación difícil”, sorprendió Michlig. “Los municipios tendrán serias dificultades financieras”, sobre todo Rosario y Santa Fe que ya señalaron “la imposibilidad de funcionar sin asistencia de la provincia”. “El presupuesto de Santa Fe prevé un déficit superior a los 500 millones de pesos y la necesidad de financiar deudas por 800 millones. El déficit de Rosario es de 1.730 millones. Si la provincia no tiene condiciones financieras adecuadas no habrá posibilidades de asistirlos a ninguno de los dos”, volvió a sorprender el ministro. Y aportó otro número: la asistencia financiera de la provincia a Rosario en 2019 “fue del orden de los 1.700 millones” que es “similar” al déficit de 2020.
Michlig habló de la crisis poco después de que el secretario general de Festram, Claudio Leoni, anunciara el fin de la “tregua política” en municipios y comunas por los “cambios de gobierno” y la vuelta a las movilizaciones, protestas callejeras y cortes de rutas (ver aparte). Uno de los gobiernos más complicados es el de Coronda, donde los 350 trabajadores municipales cortaron ayer la ruta nacional 11 porque aún no cobraron el sueldo completo de diciembre y les deben el de enero. El intendente radical Ricardo “Bachi” Ramírez responsabiliza de la situación a la deuda de 50 millones de pesos que le dejó su antecesor del PJ y advirtió sobre la escalada social. “La ciudad puede explotar en cualquier momento”. En San José del Rincón, gobernada por el intendente socialista Silvio González, los trabajadores van por el segundo día de paro –y hoy sería el tercero- porque sólo cobraron la mitad del salario.
Ante esta situación, el gobierno de Perotti propuso crear un “Régimen Transitorio de asistencia financiera a municipios y comunas” al que asignará más de 3.000 millones para que puedan “afrontar la política salarial, la prestación de servicios esenciales, situaciones de emergencia, cancelación de deudas o inversión real directa”.
-¿Y qué pasa si la ley no sale? –se le preguntó a Michlig.
-Habrá serias dificultades para atender las necesidades de municipios y comunas. Ya hay un sinnúmero de municipios, incluso los más grandes, que señalan la imposibilidad de funcionar sin asistencia de la provincia -contestó. “Santa Fe prevé un déficit superior a los 500 millones de pesos y la necesidad de refinanciar deudas por 800 millones. Rosario tiene un déficit previsto en su presupuesto de 1.730 millones de pesos. Entonces, si la provincia no tiene las condiciones financieras adecuadas no habrá posibilidades de asistirlos a ninguno de los dos. En proporción, hay un montón de municipios que plantean una problemática similar”, agregó el ministro.
-¿Rosario y Santa Fe se quedarían sin asistencia financiera de la provincia? ¿Qué puede pasar si ocurre eso?
-Ya lo señalaron los intendentes (Pablo Javkin y Emilio Jatón). Tendrían serias dificultades para consolidar y renegociar la importante deuda flotante que tienen con contratistas y proveedores. En Santa Fe, supera los 800 millones de pesos y en Rosario es más alto. Y tendrían serias dificultades para financiar el presupuesto de 2020: en Santa Fe hablamos de un déficit de 500 millones y en Rosario de 1.700 millones, que es similar a la que asistencia (del gobierno de Miguel Lifschitz) en 2019. Tendrían serias dificultades en el segundo semestre, cuando comiencen a vencer el refinanciamiento que se hizo el año pasado. La situación de la provincia es difícil, pero también la de Rosario y Santa Fe y muchos municipios y comunas –contestó Michlig. “Y aún cuando la ley se aprobara, tampoco será fácil tramitar las operaciones de créditos. No existe un mercado internacional de capitales. Hoy, los préstamos son en pesos, a corto plazo y con altas tasas” y “en ese escenario, tampoco será fácil lograr financiamiento”, advirtió.