En el marco de una jornada nacional, organizaciones sociales, sindicales y políticas marcharon ayer al mediodía hasta la sede de la Bolsa de Comercio de Rosario para repudiar la llegada de la misión de control del FMI. "La deuda es con el pueblo, no con el FMI", fue una de las consignas más escuchadas en el masivo acto realizado en la intersección de las calles Corrientes y Córdoba. Pero no fue la única. Las organizaciones pidieron por políticas públicas que atiendan las urgencias y emergencias populares y que protejan a jubilados y jubiladas, por paritarias libres y el sostenimiento de la cláusula gatillo, y expresaron su rechazo a cualquier intento de reforma laboral y previsional. Además, propusieron la investigación de la Deuda Pública Externa que, consideraron, sirvió para financiar la fuga de capitales. "¡Fuera FMI! ¡Nada que negociar, nada que pagar!", exigieron. Por la tarde, el Frente de Izquierda Unidad también realizó un acto en la Bolsa para rechazar el pago de la deuda.
La marcha partió desde la Plaza Montenegro y culminó en las puertas de la Bolsa de Comercio. "No es casual que estemos acá, porque acá operaba Vicentin. Nosotros vemos un paralelo enorme. Esta empresa le financió la campaña a Macri. Cuando perdió, se llevaron la plata y dejaron a los obreros y a los productores en la lona. Macri hizo lo mismo, se financió la campaña con el crédito del FMI, se la llevaron toda para afuera y ahora a nosotros nos dejan el muerto. Esto no lo podemos aceptar de ninguna manera", dijo el referente de la CCC, Eduardo Delmonte, debajo del escenario montado sobre el acoplado de un camión cruzado sobre calle Corrientes.
"No es casual que estemos acá, porque acá operaba Vicentin. Nosotros vemos un paralelo enorme. Esta empresa le financió la campaña a Macri". Eduardo Delmonte.
"Con un tercio de la población en la pobreza, una desocupación que supera los dos dígitos y salarios y jubilaciones por debajo de la canasta básica, no hay nada que negociar con la misión de control del FMI y nada tienen que hacer en nuestro país", señala el texto del documento consensuado entre las organizaciones que participaron de la marcha. Había banderas de la CTA Rosario, Aceiteros, Siprus, Amsafé Rosario, la CCC, el MTE, COAD, FUR, el Sindicato de Prensa Rosario y el de Cadetes, entre otras.
Lorena Almirón, titular de ATE Rosario; Gabriela Pereyra, de la CTA de los Trabajadores; Mónica Crespo, de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular; Liliana Galeano, de la CCC Pueblos Originarios; Yamile Baclini, secretaria Adjunta del sindicato de Trabajadores Municipales, y Claudia Indiviglia, del Frente Multisectorial 21 F, fueron las encargadas de leer las consignas consensuadas por las organizaciones.
Además del repudio a la llegada de la misión del FMI, pidieron que no se estatice la deuda, rechazaron la reforma laboral y previsional, se manifestaron en la defensa de la Salud y la educación Pública, y exigieron la Ley de emergencia en violencia de genero. "La deuda es con nuestros pibes y mayores, la clase trabajadora y los pequeños productores de la ciudad y el campo, las comunidades de pueblos originarios, las mujeres y disidencias", plantearon las organizaciones. "Que paguen quienes se beneficiaron con la deuda: los acreedores sabían (o estaban en condiciones de saber) que los fondos prestados no beneficiaban a la población", agregaron.
Al término del acto, el titular de los Municipales, Antonio Ratner, señaló: "Sabemos cuáles son las recetas recesivas que siempre plantea el Fondo. Los trabajadores estamos diciendo basta a esta presencia. Y a los responsables que nos llevaron a esta situación, de más de 44 mil millones de dólares, que tengan el castigo que se merecen. Nosotros vamos a movilizar, a estar en la calle donde siempre estuvimos, y también estamos respaldando a nuestro Presidente para que negocie con un pueblo movilizado".
Por su parte, el secretario General de Amsafé Rosario, Gustavo Terés, dijo que el Fondo "viene a condicionar las políticas sociales y económicas de nuestro pueblo. Sabemos que el sometimiento y la aceptación de los condicionamientos que propone el FMI nada bueno trajeron para los pueblos, sólo pérdidas y padecimientos. Así fue en Grecia y en otros lugares de Europa, y también en la historia de nuestro país. Es una deuda ilegal e ilegítima, nada de lo que se prestó fue a parar a los bolsillos de algún trabajador, trabajadora o algún ciudadano de a pie".