Las trabajadoras organizadas sindicalmente, venimos llevando adelante y sosteniendo diferentes reclamos vinculados con nuestras condiciones laborales y nuestro salario.

En CABA lxs docentes tenemos congeladas nuestras asignaciones familiares desde 2013 por el Gobierno de la Ciudad. Percibimos 270 pesos por hijx. El 6 de febrero nos convocamos compañerxs de ATE, UTE y Subte en el Juzgado de Marcelo López Alfonsín, para solicitar una Audiencia Pública donde se aborde la actualización de las Asignaciones Familiares. Nuestra consigna comparaba el monto de la Asignación con el valor de un paquete de yerba. Ese es el valor que le da el Gobierno de la Ciudad al derecho y protección de nuestrxs hijxs. Las trabajadoras sufrimos y somos víctimas de la división sexual del trabajo, sobre las que se sustentan las bases del patriarcado. Somos quienes nos hacemos cargo de las tareas domésticas y de cuidado, al concluir nuestra jornada laboral. Muchas como jefas de hogar no cuentan con otros ingresos y deben hacer frente a las necesidades de su familia y de la vida cotidiana.

La gestión de la Ciudad ya ha mostrado su intención de no respetar los derechos de lxs trabajadorxs. Tampoco los de lxs niñxs y adolescentes, en tanto alumnxs de las escuelas públicas que se perjudican con las políticas neoliberales aplicadas en el sistema educativo. Vacantes que faltan, escuelas con problemas de infraestructura, menos raciones para los comedores son avanzadas que muestran la actitud de desprecio hacia los derechos que defendemos a diario. Y en este caso, la no intención de actualizar las Asignaciones familiares, que corresponden a nuestrxs hijxs, es una pauta más de que las infancias le importan mucho menos que las baldosas y los maceteros.

Ese jueves 6, a días de reincorporarnos a las escuelas, nos encontramos las compañeras para acompañar el pedido de nuestrxs referentes sindicales, en el Juzgado de Tacuarí 124. Allí como tantas veces conjugamos lucha con alegría. Organizadas como siempre que la calle nos encuentra movilizando, visibilizando las mezquindades de esta gestión, compartimos varias horas a la espera de una respuesta. Nos apoyamos, nos damos fuerza, sumamos nuestras voces para reclamar respeto hacia nosotras como trabajadoras y hacia nuestrxs hijxs como parte de las infancias que merecen una vida digna. De cara al próximo 8M, no podemos dejar de pensar en esas mujeres que luchaban por una jornada de ocho horas y cuestionaban el trabajo infantil. Nuestra realidad como trabajadoras también está ligada a las Infancias. Las Asignaciones Familiares son parte de nuestros derechos como trabajadoras, pero impactan en nuestra condición de madres.

Finalizada la reunión, nuestrxs referentes, Angélica Graciano, el Tano Catalano y Beto Pianelli, nos comunicaron que se logró que se fijara como fecha de Audiencia Pública el 18 de marzo. Nuevamente nos encontraremos en la calle Tacuarí junto a las compañeras. Y me quedo con las palabras de Angélica, encontrarnos allí para poner nuestra voz al reclamo. Sabemos de la importancia de la lucha y de la organización para llevarla adelante. Sabemos ponerle el cuerpo y la voz como un colectivo que crece.

*Docente de Nivel Inicial – UTE.