Por primera vez, los rugbiers detenidos hablaron frente a la fiscal y el juez de Garantías aunque se negaron a responder la declaración indagatoria. A pesar de ello, los acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa se quejaron del trato recibido por la fiscalía y denunciaron irregularidades en el proceso judicial.
También dijeron que en el complejo penitenciario de Dolores, donde están alojados, otros presos los amenazan con violarlos o lastimarlos de alguna manera. Remarcaron que se sintieron engañados y que no confiaban en la fiscal Verónica Zamboni.
Qué dijo cada uno de los rugbiers
Máximo Thomsen:
- "Nosotros no teníamos ni idea de lo que estaba pasando, no sabíamos nada, y al no saber nada, nunca tener un antecedente penal, nosotros confiamos en la Justicia. Después nos dimos cuenta que la fiscal nos mintió en la cara. Nos hizo pasar a firmar papeles en distintas oficinas, que esos papeles nos enteramos que decían que nos habían mostrado las fotos, videos, y que nos habían explicado el hecho y en realidad no se nos había explicado nada".
- "Lo único que se nos explicó es que la noche anterior se le había entregado a una familia un pibe en un cajón".
- "A nosotros nos condenó la sociedad. Nos condenaron los medios diciendo lo que supuestamente había pasado, ellos tenían los videos y nosotros nos enteramos por nuestras familias el día de visita ya privados de la libertad".
- "Los otros presos nos gritan que tienen precio nuestras cabezas (...), que nos quieren violar, nos gritan de todo por la ventana".
Ciro Pertossi:
- "Yo declararía pero no frente a (la fiscal Verónica) Zamboni porque me genera desconfianza porque no sé si lo que yo voy a decir acá va a salir en los medios, como ya estuvo pasando".
- "Lo único que queremos es que todo esto termine. Tenemos ganas de declarar porque ya no soportamos la presión de los medios, de los presos que nos vienen amenazando cada día".
- "Los propios internos nos dicen que a nosotros nos pueden lastimar".
- "Lo único que tenemos nosotros es miedo de que nos pueda llegar a pasar algo".
- "La fiscal nos mintió y nos escondió cosas".
Blas Cinalli:
- "Nos dijeron nada más que a un chico se lo habían entregado en un cajón a la familia y no querían inocentes presos".
- "Tenemos todos miedo, por el tema de la cárcel, por la ventana nos gritan cosas, nos dicen que nos esperan".
- "Nosotros nos sentíamos vulnerables porque también en las rondas de reconocimiento se filtraron muchas cosas, y de nosotros"
Enzo Comelli:
- "Nos acusaron de que se le tuvo que entregar a una familia un hijo en un cajón y nosotros nos quedamos anonadados por el hecho de que no entendíamos qué sucedía".
- "Recibimos muchos insultos y amenazas de parte de otros internos por ventanas a la madrugada, a la tarde, a toda hora".
- "Nos quieren asustar las puntas debajo de nuestra ventana, gritando nuestros apellidos reiteradamente, grabando videos esperándonos en los pabellones".
Los demás rugbiers
Ayrton Viollaz y Lucas y Luciano Pertossi se negaron a declarar pero presentaron un escrito. El argumento central fue el mismo que el del resto de los detenidos: cuestionar el proceso y la labor de la fiscal Zamboni.
De la declaración de Matías Benicelli sólo trascendió que calificó de “mentirosa” a la fiscal y que al igual del resto optó por no someterse a la indagatoria.