El delantero uruguayo Santiago "Bigote" López renovó contrato con el club Villa Española, de la segunda división de su país, y al mismo tiempo amplió la cláusula especial donde no sólo podrá ausentarse para presenciar los recitales de Carlos "El Indio" Solari, sino que también cuando toquen Los Fundamentalistas o Skay.
López se define como "persona, ricotero, futbolista y después todo lo demás". Por eso no resulta difícil entender la cláusula que puso en el contrato, que le permite ausentarse de los entrenamientos o de los partidos si Solari brinda un nuevo recital.
"Bigote", apodo heredado por su padre, no es sólo un ricotero que organizaba salidas en micro desde Uruguay para disfrutar con amigos y conocidos de recitales del Indio en Tandil, Olavarría o cualquier otra ciudad argentina. También tiene un perfil solidario que le permitió encabezar una protesta de jugadores en Uruguay, para que se cumplieran las condiciones mínimas para todos los futbolistas y que contó con el apoyo de jugadores de la Selección local como Diego Godín o Luis Suárez, después de que publicara una carta en su muro de Facebook. Bajo el lema "Más unidos que nunca" consiguieron reivindicaciones nunca antes logradas, además de enfrentarse a la cadena televisiva "Tenfield", cuyo propietario es el empresario Paco Casal.
En Villa Española es intocable, tanto que los hinchas le dedicaron una bandera con su cara y su nombre que cuelgan todos los partidos. Pero no sólo por sus goles, sino por su acción en el barrio, con una programa de integración que usa al fútbol como herramienta de inclusión. Y hace tres años, el jugador organizó una cuadrilla para renovar la sede del club, donde armó un centro social para asistencia a la gente del barrio de Montevideo donde nació y donde vive.