Mientras el Coronavirus avanza y empieza a generar dolores de cabeza en Italia y España , el caso de una bebé china de 17 días que se contagió pero se curó rápidamente y sin tratamiento genera intriga entre la comunidad científica. Xiao Xiao nació en Wuhan el 5 de febrero, epicentro de la pandemia. Contrajo la enfermedad directamente de su madre, quien había sido diagnosticada previamente por los médicos.
La bebé padeció primero una infección en su sistema respiratorio y problemas cardíacos leves, según explicó Zeng Lingkong, director del Departamento de Neonatología del hospital, al medio británico Daily News . Como los síntomas no eran tan notorios, los doctores evitaron darle remedios por su corta edad. “No tenía dificultades obvias para respirar, no tosía ni tenía fiebre, con lo cual solamente tratamos su condición cardíaca”, explicó Lingkong.
Más de dos semanas después, sus síntomas habían desaparecido. Lingkong aseguró que la bebé “se recuperó completamente del coronavirus pero también de su afección cardíaca”. Antes de dejarla salir de la clínica, la tuvieron en observación al menos tres días más a pesar de que ya no tenía síntomas y le realizaron tres estudios específicos de ácido nucléico que dieron negativo. “Hasta creció y aumentó de peso”, celebró el doctor.
Los doctores en China están alarmados por la confirmación de que el virus puede transimitirse en el vientre materno. A principios de mes, otro bebé fue diagnosticado con coronavirus apenas 30 horas después de haber nacido, en el mismo hospital de Wuhan. Por eso, el especialista habló de una “nueva ruta de transmisión” vertical de madres a bebés.
Hasta la fecha, solamente en territorio chino se registran 2.618 muertes y 77.362 personas enfermas. Pero la enfermedad está también golpeando la puerta de otros países que no se habían preocupado por el virus hasta ahora. La rápida expansión del virus en Italia generó un alerta mundial e inclusive la Organización mundial de la Salud empezó a barajar la posibilidad de empezar a hablar de “pandemia ”. Según las últimas cifras oficiales, siete personas murieron en Italia y al menos 231 están contagiados en el norte del país.