La AFA recuperará el poder que había perdido y/o cedido durante el macrismo. El Caballo de Troya de la Superliga que este medio anticipó el 19 de junio de 2016 será desmontado paso a paso en los próximos meses. La decisión se tomó en una reunión de la que participaron los principales dirigentes del fútbol argentino con la excepción de Rodolfo D’Onofrio, el presidente de River que se reunió este miércoles por la mañana con Claudio Tapia
. La asociación encabezada por este último volverá a tener para sí el control de su campeonato más importante, se ahorrará un dinero considerable y cerrará un ciclo donde la política era definida desde la Casa Rosada e instrumentada por Daniel Angelici, quien todavía conserva formalmente una de las vicepresidencias de la AFA.
La decisión que viene a enmendar una conducta de sumisión al gobierno anterior fue recibida con beneplácito por la mayoría de los clubes, que además nunca estuvieron conformes con el manejo del dinero que se hacía desde la Superliga. Una fuente consultada por Página I 12 explicó que "podrían revisarse los contratos de televisión porque en su momento se firmaron bajo presión".
El encuentro donde se definió cómo será el nuevo orden del fútbol argentino se realizó en la casa de Tapia en Los Cardales. Estuvieron representados los principales clubes. Al presidente lo visitaron Jorge Ameal (Boca), Marcelo Tinelli (San Lorenzo), Hugo Moyano (Independiente), Víctor Blanco (Racing), Nicolás Russo (Lanús), Lucía Barbuto (Banfield), Sergio Rapisarda (Vélez), Adrián Pérez (Argentinos), Christian D'Amico (Newell’s), Pascual Canela (Estudiantes) y Gabriel Pellegrino (Gimnasia). También participaron el ex presidente de Banfield, Eduardo Spinosa, el secretario ejecutivo de la AFA, Pablo Toviggino, y su prosecretario Marcelo Achille. La ausencia de D’Onofrio se reparó con un desayuno entre el presidente de River y Tapía unas horas después.
Las conclusiones a las que arribaron los dirigentes pasan por dos o tres ejes: la desaparición de la Superliga tal como se la conoce hasta hoy, una superestructura con autonomía de la AFA en la toma de decisiones. Su CEO, Mariano Elizondo –que llegó a ese cargo por recomendación de Tinelli– no se sabe si seguirá, como el resto del staff gerencial. Varios clubes cuestionan hasta hoy los altos honorarios que perciben los funcionarios rentados que trabajan en las oficinas de Puerto Madero. El doble comando del fútbol que existe hasta ahora dejará de funcionar en junio, cuando terminarían de concretarse los cambios que se hablaron en la reunión del martes por la noche.
Otro cambio será estatutario y le permitirá a Tapia ir por su reelección en la AFA a mediados de año. El dirigente fue electo en marzo de 2017 y su mandato vence el mismo mes de 2021. Con la reforma planteada se lo elegirá por un segundo período que abarcará el ciclo 2021-2025. Se descuenta que habrá lista única para revalidar su poder.
Uno de los asistentes a la cena en Cardales transmitió su desahogo con este primer paso que cierra una etapa donde el gobierno de Mauricio Macri lo había invadido todo. “Nos sacamos de encima lo que suponía el macrismo y lo alejamos de la influencia que podía tener hasta ahora. Angelici no renunciaba a la vicepresidencia y con las medidas que vamos a adoptar tendrá una salida elegante”. En rigor podría mantenerse en el cargo por algún artilugio legal pero si Boca le envía una nota al Comité Ejecutivo de la AFA pidiendo su apartamiento, aquel podría decidir su alejamiento.
Es probable que no reciban estas noticias con satisfacción los dueños de los derechos televisivos del fútbol, las cadenas Turner y Fox. Los contratos serán revisados por un grupo de dirigentes, incluso con la posibilidad de que se evalúe su rescisión. “Tinelli, Pergolini y el que quiera sumarse se van a reunir para tratar el tema”, le dijo la fuente a este periodista.
Cuando se aprobó la creación de la Superliga hace tres años, algunos de los directivos que ahora darán este golpe de timón sostenían lo contrario. El modelo español que se intentó adoptar a la Argentina había llegado de la mano del presidente de San Lorenzo. En ese momento cuestionaban lo que llamaban "estructuras arcaicas de la AFA" que "no están a tono con las nuevas tendencias mundiales". El fin último era la introducción de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) a imagen y semejanza de España.
Comprobado que el doble comando del fútbol argentino no funcionó hasta hoy, que había diferencias en el manejo de los ingresos y la toma de ciertas decisiones, el final de la Superliga se tornó tan previsible como la salida del macrismo del gobierno nacional. "Todo fue puro marketing e iba de mal en peor. No había conducción y además una cosa es discutir los grandes temas con un CEO como Elizondo y otra hacerlo con el presidente de la AFA". Rápido de reflejos, Tinelli se sentó a la cabecera de la mesa que armó Tapia. El paso que sigue es un encuentro formal de la Superliga donde los dirigentes "deberán implosionarla" como le confió a Página I 12 el dirigente presente en Cardales. Eso significa disolver el convenio de colaboración que se había firmado el 27 de julio de 2016 y que está vigente todavía entre la AFA y la SAF.