Lanús sufrió en exceso este miércoles por la noche durante su visita a la altura de Quito, donde consiguió el pasaje a la segunda fase de la Copa Sudamericana al perder por sólo 0-2 ante la Universidad Católica de Ecuador, haciendo valer el 3-0 conseguido en la ida como local en Argentina.
Confiado en la diferencia de tres goles, Luis Zubeldía preservó a algunos jugadores para el periplo granate por Ecuador, como su goleador y emblema José Sand y el atacante Marcelino Moreno. Sin embargo, su paso por el Olímpico de Atahualpa tuvo mucho de negocio y poco y nada de placer.
Walter Chalá, a los 39 minutos, y Juan Manuel Tevez, a los 50 de penal, convirtieron para el conjunto local y obligaron a Lanús a refugiarse contra su área durante casi todo el segundo tiempo. La visita dependió en numerosas ocasiones de alguna intervención milagrosa a favor de sus defensores o en contra de los atacantes rivales, que desperdiciaron varias chances de gol.
Uno de los grandes héroes granates de la noche fue el arquero Agustín Rossi, quien se lució al desviarle un penal a Diego Armas sobre el final del primer tiempo, cuando la Católica ya estaba 1-0 arriba en el marcador. Aquella infracción, si es que existió, fue de todas maneras fuera del área.
En definitiva, con poco oxígeno y mucha simulación para ganar tiempo, Lanús perdió por 0-2, el resultado mínimo e indispensable que necesitaba para avanzar en la Copa Sudamericana, junto a los ya clasificados Vélez, Unión de Santa Fe y Atlético Tucumán (entra en la segunda fase como eliminado de la Libertadores). Este jueves, Independiente buscará igualar la suerte de sus compatriotas ante Fortaleza en Brasil (1-0 en la ida), mientras que Huracán ya quedó afuera a manos de Atlético Nacional de Colombia (1-4 global).