El sábado a la tarde sobre la ruta 54 entre Campo Durán (en el departamento San Martín), y Santa Victoria Este (en Rivadavia), la Cruz Roja erigirá un campamento para coordinar acciones en el marco de la crisis sociosanitaria decretada en Salta tras la muerte de niños de las comunidades por causas evitables. La mayoría de los niños son de las comunidades wichi.
Diego Tipping, presidente de la Cruz Roja Argentina, dijo a Salta/12 que las acciones que proyectaron están en función a un relevamiento que realizaron en algunas de las comunidades incluidas en los departamentos San Martín, Rivadavia y Orán. Es allí donde se extiende la crisis socio sanitaria decretada.
Según Tipping, el gobierno provincial contaría con un plan para acompañar la emergencia con el inicio de obras que solucionen lo más estructural. Por el momento poco se conoce de ese plan. Por el contrario, hasta donde se pudo ver las acciones a largo plazo surgieron de políticas nacionales. En Salta, Sáenz decretó la emergencia socio sanitaria. Pero al momento de dar su tratamiento en las cámaras legislativas, puso como prioridad la extensión de la Corte de Justicia provincial de siete a nueve miembros.
“Nos convocaron para poder coordinar en la zona las acciones en el marco de la crisis”, dijo Tipping al ser consultado sobre la participación de la Cruz Roja.
Contó que del relevamiento realizado por la entidad en comunidades de Rivadavia (sobre todo de Santa Victoria Este, pero también en Morillo), y General Ballivián (en el departamento San Martín), surgió que el 89% de la población no tiene acceso al agua segura. A ello se suma que el 84% de la población (entre niños y adultos), tuvieron diarreas sostenidas en los últimos 30 días. Al menos el 75% de esa población no tuvo acceso a una atención en el sistema de salud.
Otro de los problemas tiene que ver con el almacenamiento del agua: “más del 80% de los contenedores que se utilizan tienen alguna contaminación por suciedad o agroquímicos”, dijo Tipping. Esta situación complica la posibilidad de acceder al agua segura, aunque la que se haya repartido sea potable en su origen.
El referente de la Cruz Roja indicó que de algún modo esto implicará una continuidad a las acciones que desplegó la entidad en 2018, cuando las crecidas del Pilcomayo afectaron a las comunidades indígenas.
Ya durante esa coyuntura que generó la evacuación de algunas poblaciones, desde la Cruz Roja habían repartido dos mil filtros entre las familias e instituciones cercanas como escuelas o salitas de salud. Estos filtros implican un sistema manual que permite la potabilización de 20 litros de agua por día. En este punto Tipping afirmó que hay familias que son nómadas y por lo tanto la disposición de pozos de agua no suele ser una solución permanente. En esta nueva emergencia se prevé repartir 1200 filtros familiares, tecnología que la Cruz Roja trae desde el Reino Unido. Con ellos se distribuirán contenedores de agua de 25 litros. Los recipientes a repartir son 4.800. Los filtros tienen una vida útil de cinco años.
La Cruz Roja sumará el sistema ERU con el que cuenta la entidad a nivel mundial. Se basa en una planta que puede potabilizar hasta 30 mil litros de agua por día y que estará en el campamento.
“Nunca hubo una estrategia conjunta”
No es la primera vez que la Cruz Roja interviene en Salta. Tal como lo reconoció Tipping con las acciones que hubo en 2018 en el Pilcomayo. De hecho, existe una larga historia con terrenos que donó la entidad para la construcción del Hospital Arturo Oñativia en la capital salteña.
Al ser consultado por las razones que a su entender llevan a este despliegue ante una situación que lamentablemente siempre estuvo naturalizada, el titular de la Cruz Roja Argentina afirmó que respecto de las comunidades de esta zona “nunca hubo una estrategia conjunta”. Destacó las reuniones con el gobierno a cargo de Gustavo Sáenz desde donde “nos pidió que nos sumemos a esta emergencia”. El pedido fue en pos de que se coordine la ejecución de las acciones porque “tenemos experiencia en el mundo” sobre cuestiones como las que se viven en el norte salteño. Ante ello, “nos puso a disposición todos los ministerios”.
Desde el gobierno de Salta se afirmó ante la Cruz Roja que el plan de emergencia se complementará con obras de infraestructura que deberán generarse en el mediano y largo plazo. De hecho, Tipping reconoció que la que llevan no es una solución definitiva. Por el contrario, estimó que el plan de la Cruz Roja tendrá una ejecución de tres meses en el territorio aproximadamente, para luego continuar con el monitoreo de lo desplegado en la emergencia.
El plan de acción a cargo de la Cruz Roja involucrará 875 mil dólares, de los cuales la entidad ya dispuso el aporte de 425 mil dólares. “Esperamos que haya socios que pueda aportar la otra mitad”, dijo. En cuanto al manejo de las acciones afirmó que estará a cargo de cerca de 400 voluntarios.
Desde la entidad se indicó a los interesados que el link para apoyar su trabajo es www.cruzroja.org.ar/dona.