Familiares de Santino, el niño de cuatro años asesinado en Puerto Deseado, marcharán hoy desde las 19, en la plaza 9 de Julio de Salta Capital. La movilización fue organizada por los parientes que residen en esta ciudad, que están invitando por las redes sociales "tratando de convocar la mayor cantidad de gente que nos pueda acompañar", dijo a Salta/12 una vocera familiar que pidió resguardar su nombre. Señaló que la manifestación también se hará "pidiendo condena por los asesinos, para que su sentencia se realice lo más pronto posible".
La vocera indicó que la marcha se hace para pedir que continúe la asistencia psicológica para la madre del niño, que también fue víctima de la agresión el jueves pasado en la playa Cavendish, de Puerto Deseado, Santa Cruz, y que se autorice el traslado de un hijo que es gendarme para posibilitar que esté cerca de la familia, que reside en Rosario de la Frontera, en el sur de la provincia.
"A todas las autoridades, que no se olviden de los familiares de María, sus hijos, por ejemplo, que ahora están con miedo y están por abandonar sus trabajos allá para venirse a acompañar a ella, si pueden dar la posibilidad, uno es gendarme, el otro es militar, para ver si se lo puede cambiar por lo menos a uno para acá, para Salta, ese sería uno de los pedidos", informó la vocera.
Añadió que el otro pedido es que "se siga brindándole asistencia médica a María, si es posible en el domicilio, que tenga esa atención", que "puedan seguir las consultas psicológicas, porque ellos (la mujer y su marido) no tienen obra social. Somos una familia de trabajo muy humilde". El padre de Santino es carpintero y trabaja en su propia casa. Según contó, él mismo sale a buscar sus clientes, y no cuenta con seguridad social de ningún tipo. De hecho, la mujer y el niño fueron solos de visita a uno de los hijos de la pareja que reside en Puerto Deseado porque no contaban con fondos para pagar el viaje de los tres.
La vocera familiar destacó que si bien la madre cuenta con asistencia psicológica en este momento, y toda la familia ha recibido ayuda, "es como que se dio una respuesta rápida, momentánea, pero después quedó ahí, y ahora hay que gestionar todo otra vez", explicaron los familiares que están con ella en Rosario de la Frontera, porque gran parte de los parientes viven en Salta Capital.
El esposo y los hijos "son los únicos familiares más cercanos que están tramitando eso", explicó al vocera. La hija mayor del matrimonio reside en Buenos Aires, igual que los hijos varones mayores, uno de los cuales vive también en Buenos Aires y el otro, en Puerto Deseado. Por eso la familia solicita que se cambie de destino al gendarme, para que pueda acompañar de cerca a su madre.
La vocera familiar convocó a las personas que quieran acompañar esta movilización, y también a los trabajadores de medios de comunicación. "Vamos a estar muy agradecidos si están todos los medios. Mañana (por hoy) vamos a hablar", dijo. Sobre el final añadió que "los papás de Santino, (están) con inmenso dolor. Están muy dolidos, en lo emocional muy lastimados".
El ataque a Santino y su madre fue el jueves último. La mujer y el niño caminaban por la playa Cavendish y fueron sorprendidos por dos hombres que los amenazaron, los obligaron a caminar hasta una cueva, y luego la atacaron a ella con fines de abuso sexual.
En medio del ataque la mujer se desvaneció, aparentemente los agresores la creyeron muerta y mataron a golpes al niño.
Por este hecho están detenidos un adolescente de 16 años que admitió su participación y aportó datos, y un hombre de 33 años con antecedentes psiquiátricos.
El gobierno de Salta informó que a través de la Secretaría de Justicia está brindando asistencia a la familia "para que pueda acogerse al programa de Orientación y Asistencia Jurídica a Víctimas y Familiares de Víctimas de Delitos Graves".
El miércoles último el gobernador Gustavo Sáenz acompañó a la familia en el momento de la llegada del cuerpo del niño al aeropuerto de Salta, desde donde fue llevado por tierra a Rosario de la Frontera, donde se lo despidió antes de ser sepultado en el cementerio de la localidad tucumana de Choromoro, distante más de 80 kilómetros de Rosario. Luego el mandatorio posteó imágenes de los padres en su cuenta de Twitter.