Los defensores del pueblo y las entidades de consumidores criticaron ayer en la audiencia pública el plan oficial de quitar subsidios y aumentar las boletas del gas. “Este encuentro me hace acordar a la película The Truman Show, porque está todo guionado y sólo sirve para convalidar la legalidad del aumento. Este Gobierno no puede hacer responsables a los usuarios de lo que no se hizo en diez años. La gente no la está pasando bien. Este camino nos lleva a una situación dramática. Va a colapsar la vida de la gente. Hay 600 mil nuevos pobres en el ultimo año. Ustedes violentan el sentido común de la gente. Tomen nota de que lo que están haciendo hace que la gente viva cada día un poco peor. Los servicios públicos siguen siendo malos y ahora son caros. Acá hay personas con mucha capacidad intelectual pero no tienen la sensibilidad social porque nunca les faltó nada”, señaló Guido Lorenzino, Defensor del Pueblo de la provincia de Buenos Aires. El ministro de Energía, Juan José Aranguren, señaló que la tarifa social del gas alcanza a 2 millones de usuarios, el 25 por ciento del total conectado a la red de gas natural. Los beneficiarios no pagan el precio del gas pero sí la retribución a la distribuidora, incluyendo el cargo fijo, y al transportista. El ministro también mencionó que los usuarios que reduzcan su consumo frente al año anterior recibirán una bonificación.
“Pasamos de pagar 1,29 dólares el millón de BTU a 3,42 dólares el año pasado y ahora vamos hacia los 3,77 dólares. Nosotros exigimos que los aumentos tarifarios se verifiquen en los mismos plazos que las paritarias, que es la instancia de recomposición de los ingresos para los trabajadores. Para cerrar las cuentas fiscales, antes hay que cerrar las cuentas sociales. Hay muchos usuarios que hoy en día ya están en una situación de pobreza energética, que implica que destinan una porción muy significativa de su presupuesto al pago de los servicios públicos. Hay que tomar decisiones de tarifas teniendo en cuenta la capacidad adquisitiva de la población”, indicó Alejandro Amor, Defensor del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires.
“El 16 de septiembre de 2016, al dar inicio a la audiencia pública en la Usina del Arte, usted manifestó que ‘el invierno que viene pagaremos boletas de 500 pesos’. Aún no estamos en invierno. Sin embargo, acá tenemos la factura de Jorge, un vecino del barrio Osba, un complejo de viviendas sindicales de La Plata y por el bimestre 6/16 debe pagar 1818,68 pesos; la de Alicia, de Olavarría, que por el bimestre 1/17 debe pagar 1736,34 pesos, la de Ambrosio, de Godoy Cruz, Mendoza, que por el bimestre 6/16 debe pagar 1190,06 pesos o de Edgardo, vecino de Bahía Blanca, que debe pagar 857,96 pesos. Usted sabe bien que no habrá facturas de 500 pesos en el invierno. Pero eso no les importa. Lo que importa es imponer un relato y por repetición tornarlo real y efectivo. Pero las boletas arriba de la mesa los desmienten todos los días”, dijo Mariano Lovelli, del Centro de Estudios para la Promoción de la Igualdad y la Solidaridad.