La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo este miércoles que la confesión del periodista Carlos Pagni fue parcial y que ocultó la verdadera trama detrás de las detenciones de funcionarios de su gobierno. El columnista de La Nación afirmó en su programa del lunes pasado que los jueces de Comodoro Py empezaron a imponer prisiones preventivas arbitrarias porque el diario de los Mitre y los Saguier amenazó con publicar el domingo 3 de abril de 2016 una foto de los magistrados federales acusándolos por no detener a funcionarios kirchneristas. Como reacción, de inmediato enviaron a prisión a Ricardo Jaime, que hacía siete años que había dejado sus funciones. La vicepresidenta afirmó en una serie de tweets de la tarde del miércoles que esa versión esconde la verdad. Dice CFK que ese fin de semana de principios de abril de 2016 estaba por explotar la filtración de Panamá Papers, con la revelación de que Mauricio Macri era parte de sociedades armadas por el estudio Mossak Fonseca en Panamá y con las que él y su familia operaron en paraísos fiscal escondiendo negocios, cuentas y bienes. Por revelaciones similares, cayeron mandatarios de otros países, pero La Nación y los jueces --analiza la ex presidenta-- apostaron fuerte a las detenciones para tapar el escándalo Macri-Panamá Papers.

Cristina Kirchner arrancó su hilo de tweets de la siguiente manera: "Un conocido periodista acaba de informarnos (claro que cuatro años después) que en el año 2016 el diario La Nación estuvo a punto de dedicar una tapa de domingo a los jueces de Comodoro Py que no habían perseguido a funcionarios de nuestros gobiernos. Dijo también que, a partir de ese dato, un juez federal 'paró la publicación de la tapa' ordenando la detención repentina de un exfuncionario -y yo agrego- que, además, había dejado de serlo… ¡en el año 2009! Dicen que una verdad a medias es una mentira y resulta que lo que no contó el conocido periodista es que justamente ese domingo, 3 de abril de 2016, en el que supuestamente iba a aparecer la famosa tapa con los jueces de Comodoro Py… Era el mismo domingo en que se iba a dar a conocer a nivel mundial el escándalo de los Panamá Paper’s en el que estaba directamente involucrado el entonces presidente Mauricio Macri. Fue por eso que el juez Ercolini, el día anterior, ordenó la detención del exfuncionario".

Es decir que la mandataria evalúa que el envío a prisión de Jaime se debió, no sólo al apriete de La Nación, sino fundamentalmente para proteger a Macri del escándalo que se venía.

La filtración de Panamá Papers tuvo como cabeza al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación que lideró el diario alemán Süddeutsche Zeitung. En una evaluación posterior hecha por periodistas alemanes se consideró que el tratamiento del caso Macri en la Argentina fue muy benévolo y expresaron su sorpresa. Ese diagnóstico está en línea con las afirmaciones de CFK sobre las confesiones de Pagni.

"La verdad completa --escribió la ex presidenta-- es que: o metían preso a un exfuncionario o publicaban la tapa con la foto de los jueces. El objetivo era el mismo: tapar y encubrir a Macri en un escándalo que provocó la renuncia de presidentes, primeros ministros y ministros en todo el mundo. Como dicha detención no fue suficiente para tapar la magnitud del escándalo que se desató con los Panamá Paper’s, por estar involucrado nada menos que el presidente de la Nación, Mauricio Macri, a los dos días de ese domingo se ordenó otra prisión preventiva".

CFK se refiere al encarcelamiento de Lázaro Báez, cuando viajaba a Buenos Aires para declarar en Comodoro Py y, tras una maniobra orquestada por Patricia Bullrich, lo detuvieron en San Fernando con el argumento falso de que no había presentado plan de vuelo. Por supuesto pusieron en marcha un auténtico show: le colocaron casco, chaleco, lo rodearon de francotiradores y efectivos vestidos para la guerra y, ante las cámaras de televisión, lo trasladaron desde San Fernando a Plaza Italia y luego de regreso a una unidad de la Policía Federal en General Paz, todo para exhibirlo más.

Esta es la conclusión de la vicepresidenta: "he sostenido y sostengo que en la Argentina y en la región se instaló el Lawfare: un plan sistemático que requiere la articulación de medios de comunicación, sectores del poder judicial y agencias y organismos del Estado para atacar y destruir a opositores políticos. Finalmente es La Nación, a través de uno de sus principales columnistas, el que describe a medias y a conveniencia algunos de los escandalosos mecanismos del Lawfare sin que hasta el momento en la Corte Suprema, responsable última del Poder Judicial, se les mueva un pelo. Ahora, que las cosas empiezan a quedar al descubierto y que se desnudan los mecanismos de la persecución de opositores y del encubrimiento de la corrupción macrista, es más fácil entender la necesidad de volver a poner a la Justicia en la senda que la República le impone".

Este último párrafo pone sobre el tapete que en los tres días transcurridos desde la confesión de Pagni sobre algo que protagonizó su propio diario --una supuesta extorsión a los jueces--, ni la Cámara Federal ni los propios magistrados de Comodoro Py ni el juez directamente apuntado por aquella detención, Julián Ercolini, y menos todavía la Corte Suprema pusieron en marcha una mínima investigación. Las dos denuncias presentadas hasta el momento se originaron en el fiscal Federico Delgado y en el diputado Rodolfo Tailhade, mientras que el titular del Consejo de la Magistratura, Alberto Lugones prometió ocuparse del tema. Pero entre los involucrados hay silencio absoluto.

 

Es el lawfare hasta las últimas consecuencias.