Con su torrencial seguidilla de controvertidas órdenes ejecutivas y sus declaraciones basadas en “hechos alternativos”, la presidencia de Donald J. Trump continúa generando tal preocupación a lo largo y ancho que hasta la comunidad internacional de brujas ha puesto manos a los calderos para detener al señorón con mínimas históricas de aceptación. Sin más, para removerlo de la Casa Blanca, han creado hechiceras estadounidenses un conjuro a medida, solicitando que sus colegas de todas las latitudes las acompañen cada medianoche de luna menguante, amén de celebrarlo simultáneamente desde diferentes coordenadas y potenciar su alcance, efectividad, magnitud. El pedido, conforme los modernísimos tiempos, lo han realizado por redes sociales, creando un grupo en Facebook que recibe a encantadoras dispuestas a invertir en los elementos requeridos; a saber: una carta torre del tarot, una vela blanca, otra naranja, un cenicero, fósforos, un tazón con agua, sal, una pluma y una foto donde el empresario salga poco favorecido. Reza luego el tutorial –que ha hecho las delicias de, por caso, Lana del Rey, quien se sumó al primer ritual masivo el pasado 24 de febrero– que deben las brujas recitar las siguientes palabras mágicas: “Escúchenme, oh, espíritus del agua, tierra, fuego y aire. Anfitriones del cielo, demonios de los reinos del infierno y espíritus ancestrales: los convoco a inmovilizar a Donald J. Trump para que fracase rotundamente, para que no pueda dañar ningún alma humana, ningún árbol, animal, roca o mar. Átenlo para que no quiebre a nuestro gobierno, usurpe nuestra libertad o llene nuestras mentes con odio, confusión, miedo o desesperación. También inmoviliza a todos los que facilitan su maldad”. Más tarde, otros pasos (quemar la imagen, entre ellos), y reír robustamente, repitiendo acción cuantas veces (y lunas) sean necesarias. Es decir, hasta que Trump sea separado de su cargo, circunstancia que obligará a las brujitas a encargarse del siguiente en cargo, don Mike Pence. Empero, como esgrimen desde las propias filas, “una cosa a la vez, por favor”