El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales encabezó la marcha bajo la consigna “Jujuy no se toca”, junto a todo su gabinete, funcionarios, militantes del radicalismo, para rechazar el proyecto de intervención federal del Poder judicial de la provincia. La iniciativa es del senador del Frente de Todos Guillermo Snopek y se prevé que se tratará en el Congreso de la Nación, el próximo martes.
Una multitud acudió a la marcha que partió desde el extremo norte del Parque San Martín y recorrió varias cuadras céntricas hasta llegar a la plaza Belgrano, llevando banderas celestes y blancas, y acompañada por bandas cantaba la consigna “Jujuy no se toca”. En cambio, no llegó ningún dirigente nacional de Cambiemos como se había anunciado.
El proyecto de intervención persigue garantizar la forma republicana de gobierno y evitar que el Estado argentino incurra en faltas a su responsabilidad internacional. La iniciativa cobró mayor fuerza tras conocerse los audios en los que el presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Pablo Baca, dijo que la dirigente social Milagro Sala está presa "no por sus delitos, sino para que no tengamos que volver al quilombo permanente, a los cortes, a la quema de gomas".
Si bien el oficialismo provincial sostiene que es una operación política para dejar en libertad a la dirigente social, el tema de fondo es la ampliación del Superior Tribunal de Justicia en 2015, cuando Morales inició su gestión. El gobernador amplió de cinco vocales a nueve, entre ellos designó a dos diputados radicales (Baca, y Beatriz Altamirano) y un abogado ex candidato radical (Federico Otaola). También está en discusión la creación del Ministerio Público de la Acusación, la designación de jueces y fiscales que han llevado causas contra funcionarios y dirigentes opositores. Además, hay una serie de denuncias a funcionarios judiciales que revisten una gravedad institucional, entre ellas la acusación por violación que pesa contra el mismo Baca.
Con la marcha, Morales apostó al precio que sea el apoyo popular a su segundo mandato, que afronta graves problemas económicos y una catarata de denuncias por politizar el Poder Judicial.
El Frente Cambia Jujuy mantuvo cortado el tránsito desde las 15, hasta pasadas las 20.30. Hubo decenas de colectivos de larga, media y corta distancia contratados para acercar a la gente del interior a la capital jujeña. Las redes sociales reflejaron fotos y más fotos del clientelismo o personas “convencidas” para apoyar la gestión de Morales, hubo gente que acudió para mantener su trabajo. Se transmitió en directo la marcha y el acto por canal de aire y de cable.
Ataquen a Milagro
Al llegar a la plaza, el mandatario, junto a su compañera Tulia Snopek (hermana del senador) y una gran comitiva de funcionarios, proyectaron un video con ocho testimonios que demonizan a Milagro Sala.
El gobernador apostó, como en la campaña electoral, a revivir a su enemiga, detenida desde enero de 2016. Esa campaña, que pivotea sobre la idea de “violencia, corrupción”, estigmatiza a las organizaciones sociales que durante 15 años realizaron viviendas, escuelas y otras obras. Hoy esas obras son administradas algunas por el Gobierno, y otras están abandonadas.
El gran acto que montó el Gobierno y el mensaje de algunas de las personas que participaron de la movilización fue que lo hacían para “defender la paz social”. “No queremos la libertad de Milagro Sala”, “queremos vivir en paz”, fueron los mensajes reiterativos durante la marcha.
Para el acto se levantó gran escenario en San Martín y Gorriti, como hacía en otro tiempo la Tupac Amaru. El gobernador intentó repetir la foto. En ese marco, habló de “defender a Jujuy. Nadie en la República Argentina sabe lo que nos costó recuperar la paz y terminar con la violencia y la corrupción. Por eso, jujeños y jujeñas no bajen los brazos, no permitan que nadie hable mal de Jujuy. Cuidemos Jujuy, cuidemos la patria”.
Luego en declaraciones a la prensa se mostró enojado: “se busca intervenir el Poder Judicial con muchos argumentos, pero con la finalidad de liberar a Milagro Sala y de darle impunidad, y que volvamos a las peores épocas de violencia a la que no queremos volver los jujeños” afirmó.
Subrayó varias veces que se trata de defender las instituciones y la autonomía de la provincia. "Acá ha actuado un Poder Judicial independiente. Va a empezar un debate en Buenos Aires para intervenir Jujuy y sería un atropello”, aseguró.
En cuanto a las conversaciones con el presidente Alberto Fernández, dijo que tienen diferencias, "él tiene diferencias conmigo y no solo políticas. Pero hay respeto”. Y atacó a "los sectores ultra kirchneristas, los más extremos que están buscando la intervención y que tiene representación en el Congreso. Hay que correr el velo, y bajar el humo de todo lo que se dice. Porque detrás de lo que se dice esta la libertad de Milagro Sala, lo que no puede pasar. La justicia ha actuado, dictó cuatro condenas, dos causas en la Corte Suprema, tengo la expectativa que la Corte revise las causas de las actuaciones de la justicia jujeña, y que vean los jueces que han intervenido”, puntualizó.
“No hablemos mal de los jueces", pidió. Dijo que "hay jueces buenos y malos, no se puede tirar esta sospecha sobre toda la justicia Argentina y menos sobre la jujeña”.
El mandatario jujeño dijo que no se meterá en el debate acerca de si hay o no presos políticos ,"es un tema interno de sectores del gobierno”, minimizó. Y volvió a insistir en que "hay sectores ultra kirchneristas que no quieren cerrar (la grieta), que el país transite otro camino. El país del consenso, del acuerdo y hay sectores opositores que quieren tirar de la soga”.
Juicio político y violación
Sobre la denuncia al presidente del Superior Tribunal de Justicia, Pablo Baca, por violación a una ex funcionaria de Cambiemos, Morales destacó que se habilitó el juicio político. En este sentido dijo que “(el periodista Horacio) Verbistky ha puesto en marcha en Jujuy un sistema de inteligencia paralela de escuchas".
Antes se difundieran audios en los que Baca expresa que "Morales es el jefe y que la tiene detenida a Milagro Sala". Esta difusión habilitó un juicio político en la Legislatura provincial, que está en proceso de investigación. Baca presentó su descargo por escrito, y respecto a los audios sostuvo que las pericias demuestran que han sido alterados, editados.
La denuncia de violación fue posterior a los audios, en este sentido el gobernador defendió el rol del juez Baca, hoy de licencia. Es decir, argumentar y no creer en la víctima, “es bastante poco creíble toda esta historia. Es un tema que investiga la justicia y la persona es una candidata a concejal del sector del que presenta el proyecto de intervención. Todo esto tiene que ver con el desprestigio del Poder Judicial. Todos los ataques al STJ forman parte de una campaña. No somos ingenuos” enfatizó el gobernador.
Es notable que el tema le provoca mucho enojo a Morales: “(a) todos estos que meten leña y quieren seguir dividiendo al pueblo rgentino hay que decirles basta y a los que se quieren meter con Jujuy, también le decimos basta. Estaría bueno que los propios dejen de joder un poco al Presidente”, finalizó.