El mito del hombre vegetal, de la venganza más pringosa e impensada de la Madre Naturaleza a partir de las fechorías ambientales del homo sapiens, fue siempre parte del encanto de La Cosa del Pantano. Este personaje clásico de la escudería DC ha vuelto para protagonizar Swamp Thing, la miniserie de terror que puede verse en el menú de HBO Latinoamérica. La criatura verde moho en cuestión ha cosechado una sorda popularidad pese a haber sido un verdadero híbrido, no sólo en sus tejidos que entrecruzan planta y mamífero, sino también en cuanto a sus diferentes etapas autorales en comic, ya que desde su creación, en la publicación original de 1972 por Len Wein y Bernie Wrightson, su historia ha sabido reescribirse y transformarse según los distintos matices de horrores científicos propios de cada época. Un recorrido que incluyó una era de oro en los '80, cuando cayó en las manos del gurú Alan Moore.
La nueva serie de Swamp Thing significa, para esta icónica Cosa de las marismas, un retorno con rol protagónico a la pantalla después de casi 30 años: a principios de los '90 coexistieron una serie con actores que sumó 72 episodios con una fugaz animación que sólo firmó cinco episodios. Sin embargo, el antecedente más importante hay que buscarlo en la película de culto de Wes Craven, El monstruo del pantano, de 1982, cuyo cast incluía al sonriente Ray Wise (Twin Peaks).
Acaso más oscura que sus predecesoras, esta Swamp Thing de HBO está segmentada en diez episodios y respeta la idea de la criatura híbrida surgida en los pantanos como consecuencia de alguna aberración químico-tecnológica de los seres humanos. Siempre alegórica, con una amenaza de epidemia viral que desde su primer episodio sugiere un link con las narrativas de los noticieros internacionales, Swamp Thing no se parece a otras series sobre superhéroes: el carácter de antihéroe de este ser con genes de científico, piel de musgo y mirada de saurio –sino de batracio– lo acerca más a los monstruos tristes, acaso queribles, como Godzilla o la criatura de Frankenstein, que a un simple monstruo malo, viscoso y feo. El elenco incluye a Derek Mears como la criatura (un experto en personajes amenazantes sin cara, ya que ha sido el depredador de Depredadores y el Jason de Viernes 13), además de un habitué del bizarro, como Ian Ziering (héroe de la saga Sharknado). Y pese a que HBO no pondrá al aire una segunda temporada para la serie, la Cosa tiene futuro: por estos días, el poderoso J.J.Abrams y su compañía Bad Robot negocian llevar adelante una nueva producción sobre Justice League Dark, la línea de personajes de DC en la que se enfila la criatura del pantano. PáginaI12 entrevistó a Mark Verheiden, guionista y productor de la serie Swamp Thing, para consultarlo sobre el reverdecer del verde ser.
-The Swamp Thing ha tenido muchas etapas, desde la saga de Alan Moore a los crossovers con otros personajes de DC, e incluso diferentes orígenes para explicar su historia... ¿Hasta qué punto la serie es respetuosa de la narración original?
-Leí absolutamente todos los cómics originales, de hecho, compré la mayoría de ellos cuando fueron publicados por primera vez. Disfruté mucho la historia original y los primeros números, de los creadores Len Wein y Berni Wrightson, pero creo que cuando se hizo cargo Alan Moore (con la ayuda de los artistas Stephen Bissette y John Totleben), The Swamp Thing encontró una voz verdaderamente única. El nuevo equipo creativo tomó un personaje que ya era fascinante y lo dio vuelta, contando esas historias de “suspenso sofisticado”, tal como se las vendía literalmente en las tapas de los comics: una narración gótica, muy climática, salvaje... Sé que el coguionista de la serie, Gary Dauberman, también se interesó por las historias de Moore. Lo que nos atrajo especialmente de este proyecto fue la oportunidad de hacer una versión inspirada en aquellas historias que tanto amamos.
-¿Y cómo describiría esta nueva versión de The Swamp Thing?
-Yo diría que es un “gótico sureño” con un buen toque de horror. Sentimos firmemente que los personajes humanos, como Sunderland y Matt Cable, son tan importantes como el monstruo a la hora de explorarlos, entenderlos, darle forma. Pero bueno, nuestro productor ejecutivo es James Wan, director de Saw –El juego del miedo–, lo que significa que, evidentemente, también buscamos proveer la dosis exacta de miedo.
-¿Qué es lo mejor que tiene la serie? ¿Qué es lo que más le gusta de la criatura?
-Personalmente, me pone muy contento el tono que logramos, oscuro, espeluznante y misterioso. Y quedé muy satisfecho con nuestro elenco, que llevó el universo de The Swamp Thing a otro nivel. En especial, me conquistó el trabajo de Derek Mears, quien cada vez que se ponía el increíble traje de la criatura, encarnaba toda la emoción y la tragedia del personaje. Lo que me encanta de la representación de Derek es que encarna la trágica dualidad de este personaje: un hombre atrapado dentro del cuerpo de un monstruo, desesperado por las cosas que ha perdido, pero también maravillado por los mundos que se le han abierto.
-Pensando en el “lado vegetal” de la criatura, o en la amenaza mundial de un virus, que aparece rápido en la serie... ¿hay una subtrama ecológica, un mensaje político en la serie?
-Todo el universo de The Swamp Thing tiene un sesgo ecológico, dado que la criatura fue creada a partir de la contaminación en el pantano. El elemento ambiental está en el origen de esta historia. Y la idea de que el pantano se empieza a rebelar contra estas toxinas, es elocuente. No se trata de una serie abiertamente política, pero el cambio climático es real y definitivamente queríamos explorarlo.