El fallecimiento de Julio Grondona, en julio de 2014, hizo imaginar que el fútbol argentino recuperaría ciertos patrones que había desechado. El orden, la transparencia, y sobre todo la necesidad de transmitir honestidad, eran los reclamos que se le hacían a una dirigencia viciada de poder. Sin embargo, lo que sucedió luego de aquella fecha no sólo profundizó los males de la actividad, sino que agudizó una situación que comenzó a rozar lo tragicómico.
El nuevo disparador es la posibilidad concreta de que se modifique el sistema de descensos, en una temporada que ingresó en su recta final. La decisión de que la Copa de la Superliga -comenzará el 15 de marzo- esté incluida en la suma de puntos para los promedios y para la clasificación a las Copa internacionales ya era curiosa, y ahora le agregarían una nueva modificación al reglamento.
La dirigencia analiza seriamente que los descensos sean dos en lugar de tres, y ese tercer equipo que también iba a jugar la Primera Nacional, tenga ahora la posibilidad de participar de una Promoción -sería por única vez- con el perdedor del Reducido por el segundo ascenso de la segunda categoría. La Superliga está finalizando, y la Copa siguiente tiene 11 partidos asegurados para cada equipo. La resolución se conocerá en las próximas horas…
Un ranking elaborado por la Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (IFFHS) ubicó al campeonato argentino entre los diez mejores del mundo. Y anteriormente, lo había seleccionado entre los cinco privilegiados. Por primera vez desde 2009, la Premier League de Inglaterra quedó en la cima, reemplazando a La Liga de España, que había sido la mejor en 2018. Para los ingleses, seguramente, fue clave que las dos finales continentales de Europa fueron británicas: Liverpool-Tottenham en la Champions League, y Chelsea-Arsenal en la Europa League.
La IFFHS no tendrá en cuenta, probablemente, un montón de situaciones internas que atraviesa el fútbol argentino para posicionarlo en ese lugar, y reconoce de alguna manera que dos equipos del país participaron de las finales internacionales: River-Flamengo y Colón-Independiente del Valle.
La próxima temporada, además, se disputaría con dos torneos cortos, volviendo a cambiar el formato original. Con estas particularidades, quizá, el fútbol argentino pueda escalar en esa tabla mundial y llegar al primer puesto del planeta. Todo es posible.