“Llegamos a este acuerdo para evitar despidos. La idea es arreglar lo que podamos arreglar, pero con la gente adentro. Todos fueron solidarios y colaboran para que se mantengan los puestos de trabajo”, explicó Marcelo Barros, secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA) para poner en marcha un esquema de suspensiones rotativas de todo su personal en la automotirz General Motors . La medida se extenderá hasta fin de año y alcanza a 1.500 trabajadores, e implica un recorte progresivo en los salarios. Desde el gremio informaron que entre marzo y agosto los operarios percibirán el 70% de los sueldos, el 65% entre julio y septiembre y el 60% en los tres meses restantes de 2020. La compañía confirmó el acuerdo, aunque evitó pronunciarse sobre la medida.

Aquejada por la crisis económica en el país y en la región -en especial Brasil, el principal mercado de GM-, la automotriz negoció el acuerdo para continuar la producción en un turno en su planta en Alvear, al sur de Rosario.

En rigor, el esquema de suspensiones comenzó el año pasado y lo que se negoció ahora es una extensión de la medida. A mediados de septiembre se dispuso un cronograma hasta enero, en el que se aprovechaba además el período de vacaciones para lograr adecuar los volúmenes de producción en la planta.

Durante todo febrero y en los primeros días de marzo no hubo actividad debido a una parada técnica. Por entonces  Barros habia dicho que , “sólo quedaran algunos trabajadores que son quienes están a cargo de poner a punto la planta”. Además añadió que en el mes de marzo todo volverá a la normalidad. “Debemos sentarnos con la firma para establecer el cronograma de trabajo en primer semestre”, dijo. Y cerró: “Con la llegada de este nuevo gobierno tenemos expectativas de que cambie el panorama del sector automotriz y se potencie el mercado interno”. Algo que hasta el momnto no ocurrió.

 Al reiniciarse la actividad en enero de 2021se producirán 15 automóviles por hora, en un turno. La caída de las ventas, que afectó a toda la industria, llevó a GM a bajar progresivamente en los últimos dos años de 35 autos por hora, en dos turnos, a los 15 actuales.

En Smata estiman que, entre empleos directos e indirectos, la compañía genera trabajo a 4.500 operarios entre los que realizan tareas en la planta y las autopartistas de la zona.

General Motors mantiene su proyecto para la fabricación de un nuevo automóvil de alta gama. El proyecto podría ser lanzado en el mercado a mediados del año que viene. Ese plan requiere una inversión de 500 millones de dólares que la compañía ratificó sostendrá a pesar de la crisis.