Una mujer lucha por su vida en una cama del Hospital Cullen, de Santa Fe, luego de haber ingresado con el 80 por ciento del cuerpo quemado, desde la localidad de Bella Italia, a 95 kilómetros de la ciudad de Santa Fe. El miércoles a la madrugada, su hijo de 25 años arrojó combustible sobre al auto de la pareja de su madre y ésta intentó impedir que lo incendiara. El chico fue detenido ayer al mediodía, en la localidad de Frontera. Braian, el hermano de la víctima, dijo por Aire de Santa Fe: "Para mí la quemó porque ella volvió con la pareja que tenía; tras un año de separación y mi sobrino no se llevaba bien con él". El director médico del Hospital Cullen, Juan Pablo Poletti, dijo que el riesgo de vida de la paciente es alto y que se realizan las medidas prescriptas para atender a las personas que han sido quemadas.