La empresa Correo Argentino S.A. tiene nueva interventora. Sin la presencia de los abogados de Socma, en un sorteo público realizado este jueves en la sede del Juzgado Comercial Nº6, Flor Inés Farber quedó a cargo de la intervención plena de la empresa del expresidente Mauricio Macri. La medida había sido dispuesta por la jueza Marta Cirulli, tras el dictamen del Procurador Carlos Zanini que respaldaba el reclamo de la fiscal Gabriela Boquín, basado en las serias irregularidades cometidas por la firma en medio del concurso de acreedores que lleva más de 18 años.
Si bien el Correo ya tenía un interventor, el mismo había sido designado el año pasado a dedo por la Justicia, lo que fue objetado por la fiscalía. Se trataba de Carlos María Ferrario, quien había renunciado a la coadministración tras el pedido de la Procuración del Tesoro para que se intervenga la empresa de manera total. La jueza dispuso la intervención "plena" hasta que concluya el procedimiento de salvataje. Al tomar esta decisión el pasado 4 de marzo, la magistrada señaló que “el proceder que viene evidenciando Correo Argentino SA resulta esquivo e imprevisible” y “arroja un manto de duda” sobre el “esperable comportamiento sincero”.
Un pasivo inexplicable y “desmesurado”; maniobras de vaciamiento; deudas con la AFIP por el pago de Ganancias y ocultamiento, estuvieron entre los argumentos centrales que justificaron la intervención que se formalizó al mediodía de este jueves con la designación de Farber Flor. A principios de febrero, Boquín había pedido la intervención tras haber evidenciado manejos de vaciamiento en medio del proceso concursal y mientras sigue impaga la deuda con el Estado de 1700 millones de pesos, más los intereses. Para la fiscal, hubo una clara violación a la ley de Concursos y Quiebras, señalamiento que suscribió la cuestionada jueza del concurso, quien finalmente hizo lugar a la medida resistida por los Macri.
Faltazo de los Macri.
La Justicia convocó a las dos partes para presenciar el sorteo. Sin embargo, solo se presentaron en el juzgado 6 los abogados del Estado. Los representantes legales de Correo S.A. faltaron a la convocatoria. Mientras tanto, la estrategia de Socma sigue siendo la de dilatar el proceso lo máximo posible. La compañía presentó anteriormente un recurso extraordinario para evitar el salvataje, medida previa a decretar la quiebra y que ya había sido ordenada en diciembre último por la Cámara Comercial.
Se trata, nada menos, del procedimiento que obliga a poner en venta las acciones, lo que lógicamente es resistido por el grupo empresarial. Luego, una eventual compradora debe especificar cómo pagará las deudas. Si fracasara ese camino, el paso que sigue sería efectivamente la quiebra, que debería ser asumida por la controlante. Si bien la misma jueza Cirulli está imputada por las maniobras de vaciamiento de la empresa, se negó a excusarse y parece haberse acomodado a los nuevos vientos políticos al haber hecho lugar a la demorada intervención plena.
El objetivo de la nueva interventora será, entre otras cosas, impedir que la firma continúe con las maniobras de vaciamiento, mientras el Estado --ahora con una nueva conducción política-- retomará el camino para cobrar la deuda que Macri buscó condonar desde la presidencia de la Nación.