El ministro del Interior, Eduardo de Pedro, supervisó la puesta en marcha de las cámaras térmicas con sensor remoto en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde se despliegan acciones dispuestas para la prevención del coronavirus en los vuelos que llegan del exterior.
Las cámaras térmicas con sensores remotos están ubicadas en los accesos a Migraciones y permiten registrar a distancia la temperatura corporal de todas las personas que arriban al país. En tiempo real, y asistidos por personal médico, el personal de Migraciones puede advertir así si hay gente que ingresa con fiebre.
Si hubiera una detección positiva, interviene la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), para proceder al traslado de la persona a las oficinas de la Dirección de Sanidad de Fronteras, que depende del Ministerio de Salud. Allí, los profesionales verifican el estado de salud del pasajero.
De Pedro señaló que el presidente Alberto Fernández “nos indicó a todas las áreas de gobierno extremar medidas para garantizar la seguridad de todos los argentinos”, y que en virtud de ese pedido “sumamos esta nueva tecnología en el control de pasajeros, que se complementa con las acciones que viene realizando el Gobierno nacional".
Por indicación del ministerio de Transporte, las aerolíneas deben entregar a los pasajeros y tripulantes los formularios de declaración juradas sobre países visitados en los últimos 15 días. Los formularios, denominados "Declaración de Salud del Viajero", son recibidos por personal de Sanidad de Fronteras, del Ministerio de Salud, que a su vez dispuso la presencia de personal médico donde se encuentran las cámaras de sensor térmico instaladas por la cartera de Interior.
Para los ciudadanos argentinos se dispuso el aislamiento obligatorio en los casos sospechosos de quienes provengan de zonas afectadas. Las personas que presenten síntomas específicos deberán atenerse a la cuarentena vigente de 14 días: si no se cumple, caerán en una contravención penada por ley.