Tras la imputación por el delito de "homicidio calificado por codicia" para Marcelo F. y Josefa R., por el crimen de María Isabel Ruglio, ayer Fiscalía encontró más elementos que los complican. El Ministerio Público de la Acusación indicó que anteanoche se allanó el departamento de F., ubicado en Copahue al 6200, donde se encontró una cuchilla de 30 centímetros y un hacha. En tanto, una prueba de luminol -químico para determinar si hubo sangre- dio positivo en la zona del baño del departamento. El cuerpo de la mujer fue encontrado desmembrado en el arroyo Saladillo, en siete bolsas de basura.
La pareja imputada la semana pasada vivía al fondo de la casa de la mujer y para los investigadores el móvil del crimen está dado por el interés por apoderarse de la vivienda de la víctima. Las primeras pericias realizadas por orden del fiscal Adrián Spelta dieron cuenta de que en la casa de la víctima también hubo sangre, sobre todo en una pileta del patio y en elementos cortantes encontrados allí.
La investigación comenzó con el hallazgo de siete bolsas negras que salieron a flote en el arroyo Saladillo con diferentes partes del cuerpo de una mujer, entre el 10 y 11 de febrero pasado. Ahora, los dos imputados se encuentran en prisión preventiva por el plazo de ley, mientras que el fiscal sigue sumando datos que apuntan a ellos.
María Isabel Ruglio tenía 73 años y les ofreció a los acusados vivir en la parte trasera de su casa de Uriburu al 500. "La única finalidad era quedarse con la propiedad", dijo el fiscal, la semana pasada, cuando imputó al matrimonio acusado de haber cometido el hecho entre el 6 y el 7 de febrero.
