"Esto es un shock de oferta complicado de saber dónde termina. Cada vuelo que para es menos combustible que se usa, frena el turismo, frena el consumo. Se frena todo. En China las proyecciones dan dos puntos menos de crecimiento a partir de esta crisis sanitaria. Cuánto va a ser el impacto global dependerá de cuánto dure todo esto. Se está generando un cierre violento de las economías. China primero, luego Japón, Italia, Corea. El problema para la actividad económica no es únicamente la enfermedad sino las reacciones de los gobiernos para prevenir el avance de los contagios. El mercado estaba en niveles muy elevados y ahora comienza a ajustar en forma acelerada. Hace dos semanas todos querían cubrirse en bonos del Tesoro norteamericano, ahora todos quieren efectivo. Los inversores están desesperados por tener liquidez. El shock inicial de oferta terminará teniendo efecto contagio por canales comerciales".
(*) Directora de la consultora EcoGo.