Entre diciembre de 2015 y hasta el tercer trimestre de 2019, el sector textil perdió más de 27 mil empleos, entre puestos en la producción de telas y de confecciones. En una serie larga, que abarca los últimos 25 años puede observarse que el punto más grave de la desocupación en el sector se dio luego de la crisis del 2001. A partir de 2003 , la industria consiguió una recuperación por la que en 2015 se habían prácticamente duplicado la cantidad de trabajadores que existían en 2002.
El Centro de Economía Política Argentina (CEPA), que coordina Hernán Letcher, analizó las consecuencias del gobierno macrista sobre este sector de la industria, que fue el segundo que más empleos perdió de 2016 a 2019, sólo superado por el de comercio.
La confección sufrió en esos cuatro años una caída de la produccion del 36,8 por ciento. Esto quiere decir que si a fines de 2015 se fabricaban en promedio 100 prendas, en 2019 se produjeron sólo 63,2.
A su vez, el uso de la capacidad instalada cayó al 50 por ciento. El promedio era de 68 por ciento en 2015 y 2016, se redujo a 61,1 por ciento en 2017 y a 50,5 por ciento en 2018, nivel en el que se mantuvo (50,3 por ciento) en 2019.
