“Es muy triste” y “esto es lo que pasa cuando uno pasa por arriba de las normas” fueron las reflexiones del presidente de la Nación con respecto a la tragedia que tuvo lugar durante el recital del Indio Solari y que dejó dos muertos y alrededor de veinte heridos. Lo dijo esta mañana en un reportaje en la Quinta de Olivos concedida al periodista Luis Majul. 

La versión completa de la entrevista se verá a la noche en el programa La Cornisa, pero ya se divulgó un anticipo en el que Mauricio Macri se refiere a lo sucedido anoche en Olavarría: "Mis condolencias primero a las familias, es muy triste y también tiene que ver con que entendamos este cambio que hemos emprendido, este cambio cultural, que cuando hay normas y dicen 'tanta gente puede entrar a un lugar', por ahí son antipáticas, ¿no? Muchas cosas a veces resultan antipáticas. Porque dicen: 'No, si mucha más gente quiere ir, en vez de 200 mil parece que hay 300 mil', y esto es lo que pasa cuando uno pasa por arriba de esas normas".

Horas antes, el intendente de Olavarría Ezequiel Galli (Cambiemos) se desligaba de las muertes en una conferencia de prensa en la que dijo no tener responsabilidades dentro del predio donde se realizó el recital: “La tarea del municipio fue garantizar la seguridad fuera del predio y el operativo de salud, que en ningún momento colapsó, y se pudo atender a todos los heridos”.

Poco después se difundió el contrato entre el Indio Solari, la productora Chacal Producciones y la Municipalidad en el cual se detalla como el plan de seguridad y evacuación fue acordado entre los organizadores, la productora y el Municipio. Ezequiel Galli también reconoció ante la prensa: “Vino el doble de gente y se nos fue de las manos”.

Un ping pong de responsabilidades empresariales y estatales que recuerda a la tragedia de Time Warp, en la que hace once meses fallecieron cinco jóvenes y en la que, además de los empresarios Walter Santángelo (uno de los gerentes de la empresa Energy Group) y Facundo González (presidente de Multiticket), se encuentran procesados cinco inspectores del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, gobernada hace una década por el macrismo.