Un hombre de 43 años fue detenido tras ir a visitar a un familiar internado en el policlínico Pami II, violando el aislamiento, tras regresar de Estados Unidos. Se trata del segundo caso en pocas horas, luego de que el domingo se conociera que una joven que llegó de Europa cometió el mismo delito. La denuncia del nuevo suceso fue realizada por el director del Pami II tras detectar que el hombre -que ahora está con custodia policial, en aislamiento domiciliario, y será imputado- no respetó los 14 días impuestos por las autoridades de control para evitar la propagación de coroavirus. Por otro lado,  una mujer fue demorada por la policía mientras hacía compras. Los vecinos la denunciaron por violar el aislamiento. "Yo vengo de un lugar sano: Nueva York", dijo.

Según se indicó desde el Ministerio Público de la Acusación, la detención del hombre tuvo que ver con no haber respetado lo impuesto por las autoridades de control en el legítimo ejercicio de sus funciones y que tienen por objeto evitar la propagación de epidemias (Covid-19). "Se dio aviso al fiscal en turno de la Unidad de Flagrancia, Ramiro González Raggio, por la denuncia radicada en el Centro Territorial de Denuncias por el director de Policlínico de Pami II, de calle Olivie al 1100, y su abogado patrocinante", indicaron desde Fiscalía. La presentación rezaba que un hombre identificado como E. A., de 43 años, que regresó de Estados Unidos el 12 de marzo, se presentó en el efector -donde hay pacientes mayores de edad- a visitar a un familiar que se encuentra internado, sin respetar el aislamiento de 14 días obligatorio impuesta por el Gobierno Nacional a todas las personas que regresan al país, provenientes de zona de riesgo.

En base a ese aviso, Fiscalía dispuso que personal policial realice medidas para su localización y fue hallado en calle Los Naranjos al 2800, de Granadero Baigorria, en horas del medio día de ayer. Allí, se dispuso la detención por el delito calificado como "violación de medidas adoptadas por autoridad para impedir la propagación de una epidemia y desobediencia a un funcionario público en ejercicio legítimo de sus funciones".

El acusado quedó detenido en la vivienda luego de que especialistas consideraran que es el lugar más seguro para evitar la propagación de la enfermedad, si la hubiese contraído en el exterior, a pesar de encontrarse asintomático, hasta el momento. En base a esta decisión se realizaron medidas para asegurar que no hay riesgo para los vecinos, se ordenó consigna policial frente al domicilio para que se mantenga incomunicado a excepción de contacto a distancia con sus familiares directos y su abogado, manteniendo todos los recaudos médicamente aconsejados por la autoridad competente.