Este martes se cumplieron 28 años del atentado contra la Embajada de Israel en Buenos Aires. El acto de conmemoración, que se iba a realizar en la plaza seca de Arroyo y Suipacha, donde estaba el edificio de la delegación diplomática, fue suspendido a raíz del coronavirus. En su lugar, la Embajada de Israel decidió presentar un conjunto de piezas audiovisuales que recuerdan a las víctimas y rinde homenaje a los cientos de voluntarios, personal de salud, Defensa Civil, bomberos y fuerzas de seguridad que colaboraron en las tareas de socorro.
El atentado del 17 de marzo de 1992 terminó con la vida de 29 personas, dejó más de 200 heridos y destruyó el edificio de la sede diplomática israelí en Buenos Aires. Según los testimonios de los sobrevivientes y quienes estuvieron al momento del ataque, fue innumerable la cantidad de personas que colaboraron de diversas formas con el salvamento y asistencia a los heridos, la remoción de los escombros y el traslado de víctimas a hospitales y centros de salud, entre otras acciones. A su vez, cientos de profesionales de la medicina y la emergencia se pusieron a disposición de la forma que merecía semejante tragedia.
Bajo el título “El terror mata. La humanidad salva”, la campaña brinda reconocimiento a los rescatistas, tanto profesionales como voluntarios, por su accionar ante el caos, la destrucción y la muerte. Las piezas gráficas y audiovisuales presentadas por la Embajada de Israel buscan dejar plasmado que frente a un acto de horror de magnitudes inimaginables, la respuesta solidaria fue mayor.
