El presidente de Chile, Sebastián Piñera, decretó el "estado de excepción constitucional por catástrofe" para combatir la pandemia del coronavirus, que en ese país afecta a 238 personas. La medida tiene doble filo en un Chile convulsionado por las protestas sociales contra el gobierno, ya que deja en manos de las Fuerzas Armadas el resguardo de la seguridad interior y la custodia de los servicios sanitarios.

El estado de excepción tendrá vigencia a partir de la medianoche de este miércoles y regirá por 90 días, durante los cuales se endurecerán el cumplimiento de las restricciones aplicadas a las reuniones en espacios públicos.

Durante ese período se buscará asegurar distribución de bienes y servicios básicos, ordenar la formación de reservas de alimentos y otros bienes, limitar el tránsito y la locomoción y establecer cuarentenas o toques de queda. Hasta el momento Chile tenía como medida más restrictiva el cierre de sus fronteras, que entró en vigencia esta jornada.

"Estado de catástrofe"

"Las facultades que permite este ‘estado de catástrofe’ y las medidas específicas que correspondan, se adoptarán en forma progresiva, según la evolución de este virus y se informarán oportunamente a toda nuestra población", explicó el presidente a través de un mensaje a la población.

Con esta decisión el Gobierno busca "anticiparse y preparase" para un agravamiento de la circulación del COVID-19, de ser necesario. También apunta a otorgar mayor seguridad a hospitales y lugares de atención sanitaria, proteger la cadena logística y el tratado de insumos médicos, y facilitar el traslado de pacientes o personal médico.

Además, permitirá resguardar el cumplimiento de cuarentenas y medidas de aislamiento, garantizar la cadena de producción y abastecimiento y proteger y guardar las fronteras. El punto más polémico es el que dice que el Gobierno podrá disponer de las Fuerzas Armadas "como verdaderas fuerzas sanitarias" para colaborar en el sistema de salud.

"Este ‘estado de catástrofe’ permite una valiosa y necesaria colaboración de las Fuerzas Armadas para enfrentar mejor esta crisis y establece la designación de Jefes de la Defensa Nacional, los cuales asumirán el mando de las Fuerzas de Orden y Seguridad Pública en las zonas respectivas, velar por el orden público y reparar o precaver el daño o peligro para la seguridad nacional", dijo Piñera.