Miles de previas de salidas o de ranchadas antes del contraturno de la escuela. El clásico entre el Man Blue y el Man Red. Diagonales que siempre terminaban en gol. Una terna arbitral de perros. Futbolistas cabezones o usando disfraces de dinosaurios. Estrellas rebautizadas como Murillo (Valderrama), Redonda (Maradona) o Galfano (Roberto Biaggio). La posibilidad, hoy, de convertirte posta en jugador profesional (de esports). Grupos conocidos con su banda sonora. Hay muchos momentos para conmemorar a lo largo de los 25 años que está cumpliendo la saga de Konami, que acá empezó en 16 bits como International Superstar Soccer, explotó en las Playstation como Winning Eleven y se coronó como la mejor serie de simuladores de fútbol con los Pro Evolution Soccer.

Los PES nunca dejaron de ser divertidos y desafiantes, pero además de eso cada nueva entrega fue exhibiendo cómo la compañía japonesa aprendía de los errores –alguna vez el motor gráfico puso a todos bastante alienígenas, otra vez el sistema de penales o tiros libres salió mal, y así–, invertía en licencias cuando los kits y nombres no oficiales se volvían insoportables, y mantenía cierta voluntad de seguir incorporándole facetas y recovecos al videojuego que se convirtió, a esta altura, en la mejor opción en su rubro. 

 

Con espíritu conmemorativo pero sin descuidar la coyuntura, el aún nuevo eFootball PES 2020 acaba de tener su quinta actualización desde su salida, con la que se sigue refinando un juego excepcional, deliberadamente diseñado como esport. Lo más cumpleañito de todo tiene que ver con el flamante modo Iconic Moment Series, para jugar partidos épicos desde la piel pixelar de jugadores míticos, como la final de la Copa del Rey del '83 en los botines de Diego Maradona. Una figura de la que cualquiera podía ya también ponerse el traje, porque aquel Diego barbicano y de arete y ambo gris del Mundial 2010 es uno de los DT jugables del modo mánager de eFootball PES 2020. Así en el PES como en el Alien duce de Los Redondos, D10S es digital.

El nacimiento de una leyenda

En 1995 se publicaron títulos que siguen considerados entre los mejores de la historia o de su género, como pioneros o únicos en su propuesta o, de mínima, como uno de esos juegos que hay que probar: Chrono Trigger, Wipeout, Earthworm Jim 2, Comix Zone, Worms o Full Throttle. Entre ellos figura International Superstar Soccer, la edición para el resto del mundo del Jikkyou World Soccer: Perfect Eleven que Konami sacó para Japón en 1994. Ese y el siguiente International Superstar Soccer Deluxe (Jikkyou World Soccer 2: Fighting Eleven) fueron dos clásicos para las consolas de 16 bits que en la Argentina de mediados de los '90 circularon fuerte para alquiler en videoclubes, con selecciones nacionales de futbolistas con nombres de fantasía y movimientos de los más rústicos.

Del equipo de trabajo de Konami Osaka, el proyecto pasó luego a manos de Konami Tokyo, que relanzó la serie con su World Soccer Winning Eleven. Si bien el nombre ISS se siguió usando en versiones posteriores y en consolas como Nintendo 64, quedó tan en desuso como el de Goal Storm. Desde 1997 se encadenaron cuatro Winning Eleven para la Playstation original hasta que Winning Eleven 5 hizo el puente y fuera de la isla asiática se dio a conocer en 2001 como Pro Evolution Soccer. Ahí empieza otro arco argumental hasta 2008, el de PES, con la PlayStation 2 como plataforma de base y un éxito descomunal en Argentina, amparado por la posibilidad de chipear las consolas de Sony y conseguir PES truchos, incluso en sus versiones de la liga argentina, con cantitos de hinchadas, banderas y hasta relatos vernáculos.

 

En los últimos diez años, PES alternó con FIFA (la saga de la canadiense EA Sports) por el joystick de oro al mejor videojuego de fútbol, pero allí donde algunas versiones de su competidora parecían meros skins para actualizar la del año anterior, los títulos de Konami venían con avances notables en su gráfica, su catálogo de modos, su alcance a nuevas ligas y, sobre todo, con una especial atención a volver la jugabilidad más ágil, precisa y divertida, con un desarrollo notable de la física y de los ambientes que llevó a los últimos PES, en particular a eFootball PES 2020, a derramar de frenesí y tensión las pantallas, además con la que quizás sea la mejor cámara para jugar partidos digitales de fútbol. Desde su edición de 2014, los PES incluyen oficialmente la Liga Argentina, pero aún no han incorporado el fútbol femenino, a diferencia de la saga con la que rivalizan.

eFootball: la refinación de una idea

Sin importar títulos, traducciones, licencias ni plataformas, lo que hila toda la historia de los videojuegos de fútbol de Konami es su divertida jugabilidad. Alguna vez fue visto más como un arcade, o se lo consideró hasta muy oriental o demasiado espectacular comparado con el fútbol de músculos y pasto. No importa. Los PES son videojuegos, no son fútbol, o en todo caso son eso que eFootball PES 2020 bien trae al frente: PES es una plataforma de deportes electrónicos competitiva y pujante, que en su primera temporada reparte dos millones de dólares entre sus circuitos eFootball.Open (para amateurs, clanes, streamers y viciosxs) y eFootball.Pro , con equipos de jugadores digitales en nombre de los clubes de fútbol más importantes del mundo.

En el camino, Konami se agenció las licencias del Barcelona, el Manchester United –ni nos vimos Man Red– o el Bayern Munich, y en exclusiva a la Juventus –hola Piamonte Calcio en FIFA–, además de mánagers como Maradona o Cruyff y, perdón la insistencia, la cámara más perfecta de los videojuegos de fútbol hasta la fecha: la predeterminada, que parece deliberadamente diseñada para streamear o para eventos competitivos.

 

 

Para jugadores casuales, cocinó la golosina del Matchday, ese modo que permite jugar el partido (real) destacado de la semana al comando de alguno de los equipos del versus. A los más roleros les dio árboles de diálogo y un mejor manejo de los traspasos en el modo mánager. Y a los estrategas, la versión más refinada de MyClub. Y mientras se pasean los menúes, se refinan las plantillas, se programan los entrenamientos o se rosquean los traspasos, suenan bandas nuevas del rock y el pop mundial, en esa misma banda sonora que en años anteriores tuvo a Chemical Brothers, Crystal Castles, Foals, Imagine Dragons, Passion Pit o Babasónicos.

Como sus predecesores recientes, eFootball PES 2020 tiene la Superliga Argentina de Fútbol completamente licenciada (con exclusividad con River Plate y Boca Juniors), y el gesto argento de los relatos de Rodolfo de Paoli con comentarios de Diego Latorre. Además, estaba estipulado para el próximo 30 de abril el DLC de la EUFA Euro 2020, con las 55 selecciones contenidentes con kits y plantillas al día. Más que esta actualización gratuita, lo que estaba en duda era la propia Eurocopa, a partir del coronavirus Covid-19, y finalmente hace unos días la UEFA decidió aplazarla para 2021, al igual que hizo la Conmebol con la Copa América. La Superliga argentina sigue suspendida...

Con el fútbol frenado, la reclusión y el distanciamiento social, jugar es una actividad esencial. Sin ese contexto, también. Y PES, así en genérico, ofrece la plataforma más lograda para jugar al fútbol electrónico. No importa si en una PS2 chipeada o en la más fierrera de las computadoras gamers, si pagando la versión deluxe o disfrutando la edición free-to-play eFootball PES 2020 LITE , si con ganas de trabajar en los esports o de sumar una anécdota con amigos. Todo se trata de lo mismo: que la pelota cruce la línea.