El coronavirus crece a pasos agigantados en Estados Unidos . El jueves superó la barrera de los 10 mil contagios y sumó 154 muertos, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins usado como referencia nacional. Fiel a su estilo, el presidente Donald Trump consideró que el mundo está pagando "un alto precio" por la lentitud inicial de China a la hora de transmitir informaciones sobre la pandemia. También dijo, en una conferencia desde la Casa Blanca, que el país aprobó el uso de la cloroquina, un medicamento eficaz contra la malaria, para combatir al Covid-19. La locura desatada por la pandemia en Estados Unidos llevó a que el alcalde del estado de Baltimore, Jack Young, le pidiera a los habitantes que dejen de utilizar armas de fuego porque necesitan las camas de los hospitales para atender a los enfermos. Para hacer frente a la expansión del virus, el Departamento de Estado le sugirió a los ciudadanos estadounidenses que eviten viajar al extranjero y vuelvan al país de ser posible.
"Todo habría ido mucho mejor si nos hubiéramos enterado de todo esto unos meses antes, esto podría haberse contenido en una región de China de donde salió", afirmó Donald Trump. "El mundo paga un gran precio por lo que hicieron", agregó durante su rueda de prensa en la Casa Blanca, apuntando una vez más sus dardos hacia el gigante asiático.
El Covid-19 fue detectado por primera vez en diciembre pasado en Wuhan, China. Las autoridades del país fueron criticadas inicialmente por su falta de transparencia. Pero China tomó luego medidas drásticas de confinamiento de su población, lo cual le valió un claro enlentecimiento que contrasta con el crecimiento registrado por el virus en el extranjero, fundamentalmente en Europa .
El mandatario aprovechó su encuentro con periodistas para declarar que su país aprobó el uso de la cloroquina, un medicamento contra la malaria, como tratamiento para combatir el nuevo coronavirus. Las autoridades sanitarias, sin embargo, pusieron un freno al anuncio del mandatario, sugiriendo que esa opción podría llevar bastante tiempo, ya que su uso no ha sido autorizado para el tratamiento del coronavirus.
El tratamiento fue aprobado por la Food and Drug Administration (FDA), organismo que supervisa la comercialización de medicamentos en Estados Unidos. "Queremos hacerlo implementando un ensayo clínico extendido y pragmático para obtener informaciones y responder a todas las interrogantes que se plantean", dijo el director de la FDA, Stephen Hahn.
Se espera que el número de casos de coronavirus, que ya llega a los 10.755, aumente abruptamente en los próximos días debido a un incremento de las pruebas de diagnóstico, después de retrasos iniciales. En ese contexto, Washington instó a los ciudadanos estadounidenses a no viajar al extranjero bajo ningún pretexto, y a regresar a Estados Unidos de ser posible. El Departamento de Estado afirmó que los estadounidenses que no regresen al país "deberían prepararse a permanecer en el extranjero por un tiempo indefinido".
La paranoia frente al nuevo virus tampoco parece tener fin. El aumento de venta de armas en todo el territorio llegó hasta el estado de Baltimore, que por el momento solo registra cinco víctimas fatales por el Covid-19. Su alcalde, Jack Young, debió pedirle a los vecinos que cesen los tiroteos con armas de fuego porque necesitan las camas de los hospitales para atender a los contagiados. "Podrían ser sus madres, sus abuelas o alguno de sus parientes, así que téngalo en cuenta", declaró.