En tiempos de #CuarentenaObligatoria , a un chico de Lomas de Zamora llamado Joaquín, de siete años, se le cayó su primer diente. Y estaba preocupado por el Ratón Pérez: no sabía si podía circular por el aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto por el Gobierno. Su mamá decidió entonces preguntarle al Presidente vía Twitter si las restricciones para trasladarse alcanzaban al Ratón.
“Querido @alferdez necesito consultarte si entre las excepciones de cuarentena se encuentra el Ratón Pérez. A Joaquín se le cayó su primer diente y no sabemos si dejar la carta (el diente no lo encontramos) y no queremos poner al ratón en un brete y que la policía lo detenga”, escribió la madre del niño.
Alberto Fernández le contestó, en otro tuit, que el Ratón Pérez estaba exceptuado: “”Cecilita! El Ratón Pérez puede llevar recompensas por los dientes caídos porque no están en cuarentena. Pero el resto sí. Todos nos quedamos en casa!!! Así nos cuidamos y cuidamos a los demás. Que Joaquín deje su diente bajo la almohada y disfrute la recompensa!!!”
Tras ese intercambio tuitero, llegó otro por medio de mensajes de audio.
Del mismo modo que había hecho antes en Twitter con su madre, Alberto le respondió:
El Ratón Pérez cumplió con su labor y Joaquín tuvo su recompensa: 200 pesos que podrá gastar cuando termine la cuarentena.