Un duelo entre Goliath y David podría definirse el encuentro que el 21 de marzo de 1976 jugaron Boca y San Telmo en la Bombonera, el primero oficial entre ambos. Fue triunfo 2-1 para el local, conducido entonces por Juan Carlos Lorenzo, en un partido correspondiente a la Zona A del Campeonato Metropolitano.
En los albores del año en que daría inicio la dictadura militar argentina, el Toto Lorenzo tomaba las riendas de un Boca que orillaba su sexto año sin poder salir campeón. Contratado por el verborrágico presidente del club, Alberto J. Armando, dicho director técnico provenía de Unión de Santa Fe, equipo sensación de la temporada pasada y del cual se trajo para el plantel de la Ribera al arquero Hugo Gatti, al delantero Ernesto Mastrángelo (ambos con pasado en River) y repatrió al capitán Rubén Suñé. A estas caras nuevas se sumaban las de Francisco Sa (múltiple campeón en Independiente), Carlos Veglio (proveniente de San Lorenzo), Jorge Ribolzi (Atlanta) y Adrián Taverna (Banfield).
Claro que su rival en el octavo partido de aquel Metropolitano a su modo también fue sensación, dado que un año antes había ascendido tras ganar un reducido en la segunda división. Así las cosas, era la primera vez que San Telmo se plantaba cara a cara por los puntos ante su ilustre anfitrión.
Y el equipo que conducía Eduardo Janín -único director técnico que obtuvo el ascenso para el Candombero- casi da el batacazo en la mismísima Bombonera. Boca -con muchos suplentes- se había puesto en ventaja en la primera etapa con un gol de penal a cargo de Taverna, pero apenas siete minutos después lo empató Coronel con un gran tiro libre.
Ya en el complemento, a falta de un cuarto de hora para el epílogo, Carlos María García Cambón le dio el triunfo al equipo xeneize. San Telmo no pudo salir airoso en su debut ante uno de los grandes de la Argentina.
Dos meses más tarde, el 25 de mayo y ya con la sangrienta Junta Militar en el poder, el conjunto de la Isla Maciel se cobraría revancha en la cancha de Huracán, donde hizo las veces de local. En esa ocasión, Lorenzo plantó un equipo titular y Boca comenzó ganando en la primera etapa con un gol del Toti Veglio.
Pero la sorpresa llegó en el complemento, cuando en los veinte minutos finales San Telmo dio vuelta el trámite con tantos de Camejo, Coronel (segunda vez que le convertía a Boca) y Pisapia.
Esa fue la última vez que se enfrentaron en un torneo de Primera, por lo que en el exiguo historial entre ambos -de apenas dos encuentros- quedaron mano a mano. Al cabo de aquel Campeonato Metropolitano, Boca se consagraría campeón. En contrapartida, San Telmo vio ensombrecida su breve permanencia en la máxima categoría, ya que debió disputar el torneo Nacional luego de haber descendido.