En días de aislamiento social, preventivo y obligatorio, frente a la pandemia de coronavirus, organizaciones feministas refuerzan estrategias y lazos para no dejar solas a víctimas de la violencia machista. Las redes sociales aparecen, entonces, como el lugar de encuentro frente a la cuarentena. Porque poner el cuerpo no sólo implica lo físico y eso es algo que el movimiento social y político que más creció en los últimos años, conoce con holgura. Según el Registro de Femicidios del Observatorio Nacional MuMaLa "Mujeres, Disidencias, Derechos", el 62% de los casos de los últimos 10 años fue cometido en la casa de las propias víctimas o en la que comparten con el agresor. El dato no es menor y la preocupación va en aumento frente a la realidad poco visibilizada de los sectores populares.
"Las medidas de distanciamiento social y aislamiento hacen que se rompa la rutina diaria, que convivamos más tiempo con nuestras parejas y familia y que se visualice la distribución desigual de las tareas domésticas y de cuidado, lo cual puede derivar en la profundización de conflictos preexistentes y por ende en el aumento de la violencia por razones de género. Hoy más que nunca hay que cuidarnos, respetando todas las medidas y reforzar, desde el Estado y las organizaciones políticas, sociales y de los feminismos, la consigna y el hecho de que 'No estamos solas; estamos para nosotras'", recordó Majo Poncino, militante del Movimiento Evita y el colectivo Ni Una Menos, en un texto que se viralizó en los últimos días. Desde allí, recordó que ante una situación de violencia machista, está disponible el 144, línea nacional gratuita que brinda asesoramiento, información y contención los 365 días del año, las 24 horas, de manera gratuita y anónima.
En diálogo con este diario, amplió: "La cuarentena no es lo mismo para las compañeras de los barrios y un poco de pensar en eso surgió este texto", dijo sobre los interrogantes en relación a "¿cómo se desarrolla la cuarentena en los barrios? ¿Cuáles son las posibilidades? ¿Son las mismas que las de clase media de #quedateencasa?". Y consideró: "Poner el cuerpo es pensar otras formas de organización, con otras herramientas que fortalezcan lazos comunitarios y que ninguna mujer se sienta sola. Poner el cuerpo para cuidarnos en este aislamiento y ponerlo también para cuidar a otres".
La realidad en los barrios no es un dato que pase desapercibido para Marisa, una de las nueve (a veces son 12) mujeres que acompañan a víctimas de violencia de género desde la Red de Mujeres del Sur. "Escribinos. No calles. Son días en los que más cerca debemos estar", expresan desde su perfil de Facebook. "Sabemos que en este momento de estar en nuestras casas, seguramente muchas de las mujeres están con sus agresores. Hay momentos durante el año en los que las mujeres pueden salir de sus casas, estar conectadas con otras o con familiares, y buscar estrategias para no estar solas. Pero al estar en cuarentena nos pareció importante que sepan que las redes están funcionando, que estamos desde muchas organizaciones", dijo. "Por estos días tenemos contacto con varias a las que venimos acompañando. Sabemos que hay quienes están en riesgo y como herramienta en la ciudad tenemos el Teléfono Verde (0800 444 0420) y el 911", recordó. Al mismo tiempo, Marisa mencionó que se hicieron algunas propuestas para ir buscando alternativas de contacto y para "tener nuevas formas de comunicación".
La Red funciona dentro del Centro de Distrito Sur, con mujeres voluntarias. El año pasado cumplió 15 años. "Esto fue mutando: antes hacíamos reparto de folletería y talleres. Vivimos todo el proceso de avance del movimiento feminista. Antes no podíamos contar a qué nos juntábamos y decíamos que íbamos a hablar de torta fritas o de otras cosas de cocina, pero en realidad estábamos hablando de acciones y prevención de la violencia", recordó. Martes, de 9 a 11.30; y miércoles, de 15 a 17, son los horarios de atención, en el distrito. Pero, durante esta cuarentena, recuerdan: "Estamos todo el tiempo chequeando las redes, para que las mujeres no se sientan solas, que sepan que estamos".
Poncino también escribió: "Es imposible aislar femicidios, travesticidios y transfemicidios como un hecho sin relación con las desigualdades de género que se construyen en nuestra sociedad y que están atravesadas por lo económico, lo social y lo político. (...) El aumento de la violencia de género, los femicidios, travesticidios y transfemicidios nos plantean dos desafíos: por un lado, identificar las situaciones previas para intervenir en ellas con una política públicas integral, con presupuesto efectivo en la que el Estado no llegue después de consumados los hechos; y por el otro, sostener políticas de fortalecimiento que, además de evitar muertes, ofrezcan vidas y territorios libres de violencias, eduquen en la igualdad y en la diversidad". Al hablar del feminismo popular y coronavirus, planteó que "en la crisis epidemiológica al igual que las económicas somos las mujeres las que ponemos el cuerpo para sostener las diversas actividades en los barrios populares".
Desde Mumalá, también tienen presencia en las redes. "Para nosotras y nosotres, nuestros hogares siguen siendo los lugares más inseguros. Es necesario fortalecer las redes solidarias y de protección para que la restricción de circulación no nos exponga", expresaron. "Podés llamar al Teléfono Verde las 24 horas, para asesoramiento. Podés hacer denuncias en la Fiscalía, de 8 a 12, de lunes a viernes (excepto feriados). También podés denunciar en la Comisaría de la Mujer (Italia 2153) o en la comisaría más cercana a tu domicilio", enumeraron.
Sofía Botto, coordinadora de la organización, también mencionó el 144; y planteó: "Creemos que en estas situaciones de aislamiento pueden recrudecerse los hechos de violencia, por eso estamos aportando a la difusión. Lo que hacemos es motorizar, y lo hacemos basadas en los números reales que dan cuenta que más del 60 por ciento de los casos ocurren en el domicilio que las mujeres comparten con los agresores o en sus casas".
Desde la Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres proponen que se destinen plazas hoteleras durante la cuarentena para las mujeres que sufren violencia en sus hogares. Así, proponen una #CuarentenaLibreDeViolencia y piden que se realice un relevamiento de la plaza hotelera disponible en Rosario. "El aislamiento siempre fue el peor enemigo de las mujeres. El 'quedate en tu casa' no es igual para todas, por eso esta medida permitiría ayudar a mujeres que conviven con su agresor y que todas podamos hacer una cuarentena libre de violencia", remarcó Nazarena Galantini, coordinadora de la Campaña.