La cuarentena obligatoria encendió todas las alarmas en el mercado de alquileres. Desde la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires indicaron a este diario que atienden cuatro reclamos: los intereses punitorios que pedirán los propietarios a las familias a las que se les termina el contrato y no podrán mudarse; los pedidos de desalojo en las pensiones donde viven 100 mil personas, que se desempeñan sobre todo en el mercado informal o el cuentapropismo; los comercios que no podrán afrontar el pago dado que se encuentran cerrados y sin ingresos y, la falta de formalidad en el pago de los alquileres, en un escenario donde la Organización Mundial de la Salud desincentiva el uso de efectivo. La Cámara Inmobiliaria mantiene conversaciones con el Ministerio de Desarrollo Productivo para encontrar soluciones. España, Francia y Estados Unidos dispusieron medidas especiales como la suspensión de desalojos o el freno al pago de alquileres.
Inquilinos
A fines de marzo vencen alrededor de 15 mil contratos en la Ciudad de Buenos Aires, según datos de la Defensoría del Pueblo. Muchas familias no podrán mudarse dado que las inmobiliarias se encuentran cerradas y los trámites no están digitalizados. “Desde lo legal, cuando se termina un contrato, el inquilino se tiene que ir. Pero estamos en una situación de emergencia que tiene que estar por encima del Código Civil”, aseguró a PáginaI12 Fernando Muñoz, a cargo de la Defensoría del Inquilino. “La gente se va a tener que quedar, y ya nos llegaron casos de familias a las que le cobrarán intereses punitorios altos, de 1000 pesos más por día”, indicó. En este sentido, desde la entidad pedirán al gobierno de la Ciudad que haya prórrogas automáticas y al mismo precio, para evitar especulaciones.
Desde la Defensoría elevarán una propuesta para que las inmobiliarias acepten el pago con depósito o transferencia bancaria, aunque esto ya está previsto por ley. Estiman que el 85 por ciento de los pagos mensuales se realiza en efectivo, en un contexto en que las sucursales bancarias se encuentran cerradas. “La mayor consulta que vamos a tener en los próximos días es: ¿Cómo voy a hacer para pagar el alquiler si se extiende el confinamiento?”, adelantó Muñoz. “Si prorroga hasta el 10 de abril hay muchos que van a tener que pagar intereses. Hay algunos propietarios que están ofreciendo ir a la casa de las personas a cobrar, lo cual es un peligro. Otros pícaros piden 21 por ciento más si se hace el pago por transferencia bancaria, lo cual es inaceptable, porque la locación de inmuebles cuando es para vivienda familiar está eximida de IVA”, explicó Muñoz.
Otra de las cuestiones que buscarán atender desde la Defensoría tiene que ver con los desalojos. “Hay 35 mil familias, es decir 100 mil personas, que alquilan en hoteles-pensiones y están ligados al mercado informal de trabajo, por lo que es una población que dejó de tener ingresos y que a fin de mes les van a decir que se vayan”, indicó Muñoz.
Inmobiliarias
Desde la Cámara Inmobiliaria Argentina explicaron a PáginaI12 que trabajan para implementar herramientas digitales, que permitan avanzar en la bancarización de los pagos, pero además, que los pasos para alquilar puedan llevarse a cabo todos por internet. “Queremos que se puedan hacer tours virtuales para conocer una propiedad y que los contratos puedan hacerse con firmas online, es la única forma que se dinamice el sector y resolver los problemas de los inquilinos”, aseguró Alejandro Bennazar, presidente de la cámara. Durante esta semana esperan ser contactados por el Ministerio de Desarrollo Productivo para acordar una serie de medidas.
En caso de que se extienda la cuarentena obligatoria durante abril, Bennazar adelantó cómo podría llegar a manejarse el sector inmobiliario: “Se pueden llegar a realizar extensiones en los contratos, o incluso contratos nuevos. Todo indicaría que nos vamos a tener que poner de acuerdo entre las partes”. “Habrá casos en los que podrá haber una determinada aceptación a no pagar el alquiler durante un período si el inquilino se desarrolla en determinada actividad, como pueden ser los monotributistas. El propietario tiene que tener sentido común. Pero hay que evitar los aprovechamientos de los dos lados. Si el inquilino puede pagar, que no se escude en esto para no hacerlo, porque también hay propietarios que dependen de esos ingresos”, dijo a este diario Jose Rozados, presidente de la consultora Reporte Inmobiliario.