COLOMBIA

Trabajadoras sin amparo

“Estamos re jodidas. No hay otra palabra”, dijo la titular del Sindicato de Trabajadoras del Hogar e Independientes (Sintrahin), Ana Salamanca, frente a la cuarentena nacional que comenzó el 24 de marzo y durará al menos tres semanas. “Para el trabajo doméstico no hay amparo, todo nuestro sistema de trabajo desaparece”, explicó a France24. “Las cuidadoras sostenemos la economía del país pero cuando pasa un problema no nos ven por ningún lado.” La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que 126 millones de mujeres de América Latina y el Caribe trabajan en la informalidad, es decir, la mitad de la población femenina de la región. “En América Latina se traduce en inestabilidad laboral, bajos ingresos y falta de mecanismos de protección", concluyó Ana Güezmes, representante de ONU Mujeres para Colombia.

ESPAÑA

Visitas en conflicto

La presidenta de la Audiencia de Navarra y coordinadora de género de Jueces y Juezas para la Democracia, Esther Erice, alertó sobre el impacto que el estado de alarma pueda tener en los centros de encuentro familiar, esenciales para el cumplimiento del “régimen de visitas de menores” en casos conflictivos. “Es un servicio muy necesario. Si los cierran, se agudizarán más los conflictos”, dijo Erice, y reveló que con el estado de alarma no hay un criterio unificado sobre qué hacer con los centros, ya que dependen de las comunidades autónomas. “Debe valorarse su mantenimiento, sobre todo para los casos más conflictivos, pero todavía no está claro. Afecta a un gran número de menores y a mujeres en riesgo de sufrir violencia.”

MEXICO

Alertas en el encierro

“A la par de la crisis sanitaria por la pandemia del Covid-19, la violencia contra las mujeres, niñas y niños, podría incrementarse”, manifestó Angelica Ayala, del Grupo de Estudios Sobre la Mujer Rosario Castellanos (GESMujer), y dijo que la situación por la que atraviesa el país combina un entorno social de incertidumbre y miedo, y una mayor presencia de los varones en el hogar, incrementando la violencia de género. “Es fundamental seguir trabajando en la construcción de relaciones de equidad entre mujeres y hombres, porque es ahí donde se puede impactar positivamente y crear factores de protección que favorezcan que haya una respuesta conjunta de cuidado, autocuidado y sociocuidado.”