Un nuevo motín estalló en la mañana de ayer en la Unidad Penal N° 2 de Las Flores, en la ciudad de Santa Fe. Los internos alojados en el pabellón 5 se rebelaron contra personal penitenciario y dominaron ese sector de la cárcel situada en el norte de la capital provincial. Según informaron los secretarios de Asuntos Penales y Penitenciarios, Walter Gálvez, y de Justicia, Gabriel Somaglia, esto se debe a que existe gran cantidad de objetos contundentes que todavía no fueron removidos y pueden dar lugar a nuevos hechos de violencia, producto del motín que ocurrió en la unidad penitenciaria y dejó como saldo cuatro presos asesinados, dos quemados y dos con heridas de arma blanca, y más del 70 por ciento del edificio destrozado.Durante los hechos, estuvo presente en la cárcel el subsecretario de Asuntos Penales y Penitenciarios, Héctor Acuña.
Hubo presencia de familiares de los internos, a los que las autoridades penitenciarias hicieron saber que salvo los cuatro presos asesinados –en principio por otros internos– y durante las 12 horas que duró el motín, el resto de la población carcelaria, procesados y condenados, de la cárcel de Las Flores gozan de buena salud y seguirán alojados en sus celdas. Fueron convocados para el aseguramiento efectivos de la policía, los que permanecieron en el penal por espacio de dos horas, y posteriormente cuando retornó la calma, volvieron a sus tareas habituales.
El reclamo fue similar al de las rebeliones del lunes en Coronda y en Las Flores mismo, que culminó con 5 reclusos muertos: protestan por las malas condiciones edilicias, agravadas con los destrozos causados en el motín anterior, y denuncian que se sienten expuestos y vulnerables ante la posibilidad de contagio de coronavirus.
Alrededor de las 14,30, fueron trasladados tres internos de la cárcel de Las Flores al hospital Cullen. Los presos fueron llevados por impactos de balas de goma en la cabeza: uno de ellos perdió uno de sus ojos y los dos restantes tienen comprometido uno de sus ojos por el mismo motivo.
Cabe recordar que los familiares de los propios internos denunciaron ante la prensa que los guardiacárceles ingresan al penal sin las medidas de profilaxis necesarias, y que la restricción de ingresar alimentos y elementos de higiene atenta contra la salud de la población carcelaria.
Mientras tanto, hay seis convictos de la cárcel de Coronda hospitalizados en Santa Fe por causa de las heridas sufridas durante las revueltas ocurridas entre el lunes y el martes. En Las Flores, en tanto, empezaban las tareas tendientes a rehabilitar los sectores más dañados.
Los seis reclusos con heridas están alojados bajo custodia en el hospital José María Cullen de la capital de la provincia, donde también son atendidos dos agentes del Servicio Penitenciario con heridas en las piernas.
En Las Flores, donde hay un millar de reclusos, hubo cuatro fallecidos, los dos primeros hallados en un patio y en un pabellón, ambos calcinados. El Ministerio Público de la Acusación (MPA) los identificó como Matías Gastón Crespo (31), Andrés Ezequiel Behler (23), Rolando Duarte (60), y Jonatan Exequiel Coria (29).
Los tres primeros estaban detenidos en el marco de investigaciones por delitos contra la integridad sexual.
Tras los disturbios y los destrozos, el ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos de la provincia llevó a cabo una recorrida e inspección en ambas unidades. En ese sentido, voceros oficiales indicaron que se sigue trabajando para poner en funcionamiento todas las instalaciones de Las Flores, que fueron dañadas con distintos niveles de gravedad y en algunos casos llegaron a la destrucción total, como las instalaciones eléctricas.