Pequeño y delicioso
En el complejo contexto que nos toca atravesar la industria gastronómica es una de las más afectadas por la crisis. Con locales cerrados, mercaderías con vida limitada, con sueldos, servicios y alquileres por pagar, algunos lugares pequeños e independientes han decidido mantener el delivery para sobrevivir y dar al mismo tiempo un servicio a aquellas personas que no pueden o quieren cocinar. En el barrio de Boedo, Carmen es un buen ejemplo. Atendido por sus propios dueños, alli se ofrece una cocina hogareña con precios amigables, repleta de platos suculentos y tentadores que pueden verse en su Instagram junto con las ofertas del día. Joel, el cocinero, es un apasionado: él mismo prepara los panes caseros, también los fiambres y embutidos, así como la masa de las empanadas. Su papá recibe la mercadería, que es meticulosamente lavada, y todo el lugar extremó los cuidados para evitar contagios.
Todos los días hay promociones como un sándwich de fiambre casero con queso, lechuga y tomate; una poción de tarta o ensalada de atún o Caesar; o un salteado de pollo o verduras que pueden pedirse solos ($150) o con bebida ($200). Vale sumar un flan ($100) o cambiar algunas de las propuestas por el plato del día que va cambiando jornada tras jornada. A la noche también tienen precios especiales, desde seis empanadas (las de pollo son imperdibles), media pizza ($400), un pollo entero ($620), dos milanesas de carne o pollo ($700) o dos napolitanas ($900), todo acompañado por una gaseosa de litro y medio.
Carmen mantiene todo de la manera más íntima posible: el delivery se hace en un radio acotado que incluye Boedo, Caballito, Pompeya, Flores y Parque Patricios. Los pedidos se pueden hacer directamente al local o vía Whatsapp, donde una vez registrados los clientes reciben las promos del día o el menú completo (hay que tener en cuenta que que algunos de los platos se acaben rápido). En la carta suele haber salmón y langostinos; tacos y algunas opciones de parrilla.
Carmen es puro corazón y sabor. Un lugar que hace más vivible la cuarentena.
Carmen queda en Castro 1635. Teléfonos: 6505-5925 y 4921-5656. Horario de atención: lunes a viernes de 12 a 15 y de 20 a 23; sábados de 20 a 23. Mercado Pago o efectivo.
Cajita feliz
Quienes hayan pasado alguna vez por Le Moulin de la Fleur , seguro se quedaron con ganas de más. Más de sus desayunos, de los almuerzos y las meriendas riquísimas. Por suerte, aún durante las semanas que dure la cuarentena hay alternativas. Por un lado, dos de los locales seguirán abiertos para take away; por otro, están ofreciendo delivery por la zona del centro desde el local ubicado en Talcahuano y Paraguay. Y una vez a la semana su dueño Iván San Martín hace envíos personalizados a un barrio específico, así que hay que estar atentos a las redes sociales donde todos los días postean las novedades y ofertas.
Le Moulin de la Fleur es una coqueta pastelería con gran selección de panes y cosas dulces que alegran el día. Para sobrellevar el aislamiento armaron unas auténticas “cajitas felices”, con todo tipo de sorpresas. Algunas combinan dulce y salado, como la que trae tres sándwiches, una torta individual y dos macarons ($1150); otra llega con tres baguetes de masa madre, acompañadas de un financier, una madelaine, dos macarons y una mini Red Velvet ($850); una más incluye una selección de viennoiserie con croissants de chocolate y de crema pastelera, entre otras cosas ricas ($800). También hay combos que incluyen selección de panes como dos baguettes, un pan integral, un brioche y un pan de campo ($1050) o un compilado dulce que incluye brownie de coco, dos cookies, una porción de bizcochuelo, cuatro facturas y dos macarons ($1150).
Con un personal mínimo y extremando todos los cuidados para evitar contaminaciones, la cocina de Le Moulin de la Fleur funciona hasta las seis de la tarde todos los días de la semana. Los pagos se realizan por transferencia bancaria para que tampoco haya intercambio de dinero. No se trata tan sólo de vender, sino de tomar medidas extraordinarias para mantener a flote negocios y empleados. Comprarles ahora es una manera de saber que seguirán estando ahí cuando todo esto acabe.
Le Moulin de la Fleur queda en Talcahuano 888 y en Vicente López 1699 (solo take away). Pedidos por whatsapp 112639-9877, todos los días de 9 a 20 (las entregas son de 10 a 18).
Para llenar la alacena
Especialistas desde su apertura los platos envasados al vacío, ideales para comprar y comer toda la semana, Vinotinto Cocina Andante continúa llevando cosas ricas a las casas. El sistema es sencillo: la comida llega en porciones individuales que pueden freezarse hasta tres meses o guardarse en la heladera durante una semana entera. Antes de servirla, solo hay que sumergir la bolsa (de un material especial, preparado para ese calor) durante siete minutos en agua hirviendo. Pasado ese tiempo, se saca, se abre y se sirve en el plato. Y tiene el sabor a recién hecho. Hay opciones para todos los gustos, desde kebabs de ternera con maní y verdeo a pechuga de pollo al curry picante, pasando por bondiola ahumada, ensalada de calamares con papa y oliva, langostinos al ajillo o pesca con pesto. También hay platos vegetarianos como ratatouille con ricota de cabra o zapallitos rellenos con hongos (todos $240). Para acompañar hay tres opciones que varían diariamente, así como platos recién hechos como el crocante de pollo y cereales con puré de calabaza o la tortilla de papas, dos clásicos de la casa. También se puede mandar un whatsapp para recibir el menú con las distintas opciones del día. Y un extra: por cada diez porciones de los envasados al vacío, una va de regalo.
Todavía estrenando su segundo local (ambos en Palermo), los pedidos se realizan por whatsapp o por Rappi. Si el comensal está a menos de 20 cuadras a la redonda, el envío se realiza desde el local y es gratis; para distancias mayores tiene costo pero con un gran radio de entrega.
Para todos aquellos que extrañan comer afuera, o que tienen ganas y necesidad de comer algo rico y diferente, los envasados al vacío de Vinotinto son una gran opción para llenar el freezer y olvidarse de cocinar todos los días. Y cuando lleguen tiempos mejores y se pueda volver a circular sin problemas, el local de Palermo Soho suma los domingos un impresionante brunch de cuatro pasos con café y aperitivo que vale la pena probar.
Vinotinto Cocina queda en Julián Álvarez 1602 y Humboldt 2157. Pedidos por Whatsapp al 4861-4941 y 2135-3643, todos los días. Por Rappi se puede pedir de lunes a sábados de 12 a 19.