Un médico de Río Negro que había viajado a Europa y durante las últimas horas había sido internado en la provincia de Neuquén falleció esta mañana y se convirtió en la víctima número 13 de coronavirus en el país . La información fue confirmada por los familiares, a través de las redes sociales.
Se trata de Alejandro Pasarelli, quien ejercía su profesión en la ciudad de rionegrina de Cipolleti y que días atrás había sido protagonista de un rumor que indicaba que padecía el COVID-19. La familia había desmentido esa información, sin embargo esta mañana se confirmó el fallecimiento por esa causa.
El caso eleva a 13 la cantidad de fallecidos y confirma la tendencia de que casi el 70 por ciento de los casos fatales son varones. El Ministerio de Salud informó que habrá un "invierno diferente" y reiteró que se debe cumplir con el "distanciamiento social".
Passarelli tenía 59 años y ejercía como médico traumatólogo. Vivía en Cipolletti. El rumor que había estado enfermo surgió luego de presentar síntomas tras volver de un viaje por Europa, durante el cual visitó la ciudad italiana de Milán y la capital española, Madrid; dos zonas de alto riesgo de contagio.
La propia familia confirmó que durante esos días manifestó una fiebre que fue controlada antes de abordar el avión de regreso a Buenos Aires. A los pocos días de llegar, fue internado en la clínica neuquina San Agustín. Los antecedentes indicarían que se trata de otro caso “importado” y no de contagio en la Argentina.
Hasta la muerte de Pissarelli en Neuquén, previa detección en Río Negro, las únicas provincias donde se habían registrado fallecimientos eran Buenos Aires, Chaco y la Capital Federal, en cada una de las cuales hubo cuatro muertos.
El caso de hoy muestra la gravedad de la dispersión del virus a solo 20 días del primer registro de un fallecido por contagio de COVID-19. La primera víctima fue un hombre de 64 años que estaba internado en el Hospital Argerich, de la Ciudad de Buenos Aires, y que padecía múltiples enfermedades de base que lo señalaban como parte de la población de alto riesgo.
El hombre había regresado a finales de febrero desde Francia, otro país con altos niveles de contagio y su muerte ocurrió el 7 de marzo pasado y su muerte se concretó 11 días después de haber retornado. Seis días después se dio el segundo caso en una clínica privada de Resistencia, Chaco.
El 19 de marzo, otro hombre de 64 falleció en el porteño Instituto Argentino del Diagnóstico y a los tres días una mujer de 67 murió en una clínica de la ciudad bonaerense de Luján.
El martes 24, un hombre de 71 años que vivía en Mar del Plata se convirtió en el quinto caso y horas después se conoció el fallecimiento de un abogado de Chaco. Al día siguiente murieron dos mujeres en la Capital Federal, una tenía 81 años y la otra 82 con previos problemas de salud.
Hasta el momento, los caso fatales ocurrieron por contagio en lugares de transmisión comunitaria o por haber tenido un vínculo directo con personas que estuvieron en esos países.