Inspectores de la Secretaría de Defensa del Consumidor y de la Dirección General de Rentas realizaron inspecciones en grandes cadenas de supermercados y mayoristas de la ciudad de Salta. 

Se informó que hicieron controles en Maxiconsumo, Vital, Makro y Jaguar, atendiendo a que "cumplen un rol fundamental en la cadena de suministro tradicional". La secretaria de Defensa del Consumidor de la provincia, María Pía Saravia, explicó que las grandes cadenas de supermercados y mayoristas son los primeros comercios que se inspeccionan considerando que las despensas y negocios barriales se abastecen en ellos para la venta.

La funcionaria informó que durante estas inspecciones "se comprobó que estos mayoristas cumplen con los precios máximos de referencia" añadió que además corroboraron que "el importe de algunos productos es muy conveniente al bolsillo del comprador”.

También hubo un control en el “Super Oriental”, donde se labró un acta de infracción por "algunos productos cuyos valores se encontraban arriba del monto estipulado por ley".

Defensa del Consumidor informó que si bien hubo una sanción, los responsables del supermercado retrotrajeron los precios, y "si bien algunos correspondían a productos que no estaban en stock, se asegura que cuando dichos elementos estén disponibles, su venta se realizará en los precios convenidos".

Remarcación en Metán 

Por otro lado, pobladores de la ciudad de Metán, en el sur de Salta, denunciaron públicamente que están "padeciendo el incremento casi extorsivo de precios de las mercaderías de algunos supermercados locales"

Darío Ibarra, integrante de la Comisión de Derechos Humanos de Metán, sostuvo que es habitual que los comercios de esa ciudad vendan los productos a precios más altos que los que dan en Salta Capital y en San Miguel de Tucumán, los dos centros urbanos grandes más cercanos a Metán. Dijo que por ello muchos metanenses acostumbran a adquirir algunos productos en estas ciudades, "por lo significativo de la diferencia de costos", pero la situación especial por el aislamiento social, preventivo y obligatorio implica "un estado de excepción, donde en vez de que prime la avaricia debería primar la solidaridad". 

Relató que si bien en Metán hay expresiones de solidaridad destacables, hay también otras personas que se aprovechan de la situación, "todos los días hay remarcaciones en las góndolas", afirmó. Consideró que la Municipalidad de esa ciudad tiene que tomar medidas, "tiene que haber un grado de regulación para estas cuestiones" porque "no se puede tolerar el abuso de uno de los sectores más importantes, el alimenticio en este caso". "Exigimos que el gobierno provincial y municipal se haga cargo inmediatamente de este estado de situación. Que le ponga tope, que regule, que tome acciones disciplinarias ya", reclamó.