A pesar de estar al borde del fin de su existencia, porque la pandemia las obligó a bajar las persianas, y mientras piensan estrategias de supervivencia las empresas recuperadas por sus trabajadores en todo el país reaccionaron de manera solidaria y se pusieron a producir elementos de combate contra el Covid-19.
Al calor de la crisis posterior a la pueblada del 2001 se fueron multiplicando las empresas manejadas por sus trabajadores, que en la actualidad son unas 400 en todo el país, y dan trabajo a alrededor de 15 mil familias. Nunca fue fácil competir en un mercado capitalista sin un Estado de respaldo, y precisamente durante la administración macrista fueron muy golpeadas por los tarifazos. A pesar de haber resistido todos estos años ahora llegaron a una situación límite, por eso pidieron en el actual contexto de emergencia sanitaria que el gobierno las incluya dentro de las medidas de salvataje para la economía.
El lema fue "ocupar, resistir, producir", y la mayoría de estas empresas cerradas por las patronales de variados rubros lograron consolidar los puestos de trabajo, cuando el índice de desocupación tenía dos dígitos. Pero además de ser una salida laboral concreta se han caracterizado por tener una actividad de solidaridad social. Y la pandemia del Coronavirus no será una excepción.
* Envases Flexibles Mataderos está haciendo sobres para alcohol en gel.
*Textiles de Pigüé, barbijos y camisolas.
* Plasticos Salvadores (ex Oropel), envases para alcohol en gel.
* Farmacoop (ex laboratorio Roux Ocefa), alcohol en gel.
* Red Textil Cooperativa (federación de cooperativas textiles), barbijos, overoles y cofias.
* Hotel BAUEN, hotel para aislamiento de personas en tránsito.
* Gotan, en Burzaco, muebles para hospitales.
* Madygraf (ex imprenta Donnelley), mascarillas y desinfectantes.
* Cooperativa Textil Traful Newen de Neuquén, barbijos para hospitales y centros de salud de la provincia.
Las obreras neuquinas firmaron un convenio con el Ministerio de Salud provincial. “Estamos en condiciones de comenzar a producir más de 200.000 barbijos para el sistema de salud; somos una gestión obrera abierta a la comunidad, porque en su momento, cuando la pasamos mal por el cierre de la fábrica, la comunidad nos acompañó y estuvo con nosotras”, anunciaron.
La fábrica Gotan del Parque Industrial de Burzaco fue abandonada por sus dueños el año pasado, dejando sin trabajo, sueldos y aguinaldo a 27 familias. Martín Rodríguez contó que sus trabajadores hicieron las instalaciones del Metrobus en CABA y los refugios de colectivos en la provincia. Otro de sus compañeros afirmó: "Nosotros podemos producir muebles para hospitales”.
Bruno Di Mauro, de Farmacoop, afirmó que luego de una reunión con el Ministerio de Salud de La Plata los trabajadores decidieron colaborar con la producción de alcohol en gel. Armaron un equipo junto a un grupo de ingenieros químicos e industriales de la Facultad de Ingeniería de la UBA, y con el Estado encargado de proveer la materia prima pretenden producir alcohol en gel "a precios que combatan la especulación", y esperan "poder tener costos bajos para poner a disposición nuestra cooperativa".
En tanto, en Pacheco comenzaron la producción de sanitizante de alcohol y mascarillas sanitarias en la imprenta recuperada Madygraf. Jimena Puga, química de la Comisión Nacional de Energía Atómica fue la responsable de la producción, y yambién participan docentes de escuelas técnicas y estudiantes de ciencia y tecnología de UNSAM (Universidad Nacional de San Martín). Las bancas de los diputados Nicolás del Caño y Myriam Bregman del PTS-FIT hicieron un aporte económico para bancar esta primera producción que estará terminada en tres días y será para el hospital de Escobar.
En conferencia de prensa explicaron que "el objetivo es poner al servicio de la comunidad las instalaciones de la fábrica para producir estos insumos tan necesarios en el marco de la emergencia y ante el faltante en establecimientos de salud y para la población en general, podemos producir varias tandas de litros de alcohol en gel y decenas mascarillas diarias".
Madygraf se hizo conocida por sus sucesivos Cuadernazos, cuando donaron más de 150 mil cuadernos a escuelas de todo el país. Ahora remarcaron que su capacidad de producción gráfica los pone en condiciones de poder imprimir para el Estado miles de folletos preventivos ante la pandemia para los grandes, y cuadernos para los chicos. Siempre que el Estado los convoque como proveedores privilegiados, algo a lo que aspiran todas las recuperadas.
La semana pasada, cuando se abrió el clearing bancario, luego de los feriados, tuvieron cataratas de cheques rechazados, de ellos y de sus clientes. "Un desastre, si el estado no asiste en serio, el colapso es inminente", advirtió Federico Tonarelli, del Bauen y Facta (Federación de Cooperativas y Trabajadores Autogestionados). Antes del colapso, las recuperadas ratificaron su compromiso con la comunidad que, cuando nacieron, las ayudó a ponerse de pie.