Al cierre de esta edición se sucedían los contactos entre dirigentes y legisladores del Frente Progresista con el objetivo de tomar posición en torno a lo aprobado en el Senado la semana pasada. No hay ninguna duda en votar afirmativamente el fondo especial de 15 mil millones de pesos para combatir la pandemia de coronavirus, y se advierte un cambio de actitud en cuanto a la "ley de necesidad pública" en la que insiste el Poder Ejecutivo. En ese sentido, en las últimas horas las conversaciones entre los referentes el Frente Progresista permiten adelantar que la actitud de inflexibilidad exhibida hasta ahora no tiene el mismo consenso, inclusive alguno de los dirigentes más duros sostienen que "el escenario de hoy es diferente, y aún cuando creemos que el gobierno tiene recursos suficientes para enfrentar esta crisis, no queremos aparecer como que limitamos su accionar", dijo a este cronista un legislador de peso. De hecho que la sesión se adelante y se desarrolle mañana –feriado nacional– es un gesto en ese sentido, y fuentes cercanas al presidente de la Cámara de Diputados sostienen que "vamos a trabajar mañana –por hoy– para buscar alternativas y lograr consensos de modo de aprobar el proyecto que viene del Senado".

Desde la ratificación en el Senado de la "ley de necesidad pública", esta vez sin votos en contra, se produjo un cambio de escenario que acompaña además la creciente preocupación por la pandemia. Esto lo advierten los más experimentados dirigentes del Frente Progresista que en las últimas horas han visto cómo se redobló la presión sobre la mayoría parlamentaria y en especial sobre el ex gobernador y presidente de la Cámara de Diputados, Miguel Lifschitz. Más que alguna sobreactuación en la demanda del apoyo a ley requerida por Omar Perotti, pesó la opinión de Intendentes propios del Frente Progresista y el pulso de la opinión pública que lógicamente no se detiene a analizar la dialéctica de la dirigencia política. Así lo advirtieron quienes tienen y han tenido en el pasado reciente responsabilidad de gobierno en cargos ejecutivos, y al parecer el propio ex gobernador que sigue pensando que es inconveniente conceder facultades especiales pero que lo es más aún no hacerlo en esta coyuntura.

Por esa razón y más allá del epílogo de esta larga historia –que comenzó cuando se aprobó 48 horas antes del cambio del gobierno el presupuesto para la administración entrante– a esta hora las posibilidades de que finalmente se apruebe el paquete requerido por el Poder Ejecutivo son crecientes. No obstante, restan no sólo encuentros internos sino conversaciones con dirigentes del oficialismo, algunos de los cuales –según la dirigencia del Frente Progresista– han incurrido en "operaciones nunca antes vistas" como la "carta a Miguel" que leyó por las redes la vicegobernadora Alejandra Rodenas, con tono melodramático. Pero como se dijo más arriba, la escalada de cuestionamientos se vió apuntalada por las declaraciones públicas de intendentes del propio sector político, como Pablo Javkin, quien calificó de "inexplicable, incompresible e inaceptable" no acompañar la sanción de la ley. En el mismo sentido, aunque sin esa contundencia, se han hecho escuchar jefes comunales de la UCR de ciudades como Avellaneda y Ceres o los intendentes de Villa Gobernador Gálvez y de la capital provincial.

En el día de hoy se fijará el horario de la sesión que seguramente será mañana, al tiempo que se ratifique la continuidad del periodo de aislamiento y distanciamiento social en Santa Fe y todo el país.