El presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, trabaja en la generación de un fondo presupuestario propio, que reuniría 200 millones de pesos en cinco meses, para aportar económicamente a la lucha contra la pandemia del Covid-19. En ese contexto, Massa citará para este viernes o a más tardar el lunes próximo a los presidentes de los bloques políticos para definir la metodología de la generación de ese fondo de ahorro, en cuyas alternativas ya trabajan las secretarías general y administrativa del cuerpo legislativo. La propuesta del jefe de la Cámara baja va un poco más allá de lo que reclama el ala más dura de Juntos por el Cambio al impulsar una reducción del 40 por ciento de las dietas de los legisladores e incluso la venta de autos del Congreso, la suspensión de asesores y la restricción de los pasajes aéreos.
En las primeras horas de la tarde de este martes feriado, Massa ya tenía definida las medidas para generar el ahorro. La principal será el recorte “del 40 por ciento en las dietas de los diputados”, admitieron a PáginaI12 cerca del presidente de la Cámara baja. Al tiempo que –precisaron– “evaluaba aplicar el recorte a los gastos de cada diputado directamente a través de una resolución de la presidencia del cuerpo”. A ello sumará “la suspensión de asesores de diputados, el remate de autos y la restricción de pasajes y viajes”.
En tanto, el secretario general de la Cámara, Juan Manuel Cheppi, y el secretario Administrativo, Rodrigo “Rodra” Rodriguez, le acercaron otras alternativas de ahorro que Massa definiría en las próximas horas. Aunque –ante la consulta de este diario–desde ambas secretarias no dieron detalles de cuales serían las medidas complementarias.
En la Cámara baja estiman que los recortes reunirían un fondo de 200 millones pesos en 5 meses para destinar las instituciones de la salud. Aunque prevalecía la idea de “destinar su totalidad a la Cruz Roja”. Una propuesta, que reconocieron a PáginaI12, “busca despejar suspicacias sobre el destino de los fondos”. La decisión de crear el fondo para la emergencia que generó el coronavirus, comenzó a definirse el lunes por la noche mientras Massa firmaba el giro de los fondos que la Cámara baja destinó a los hospitales Garrahan y Posadas. Una iniciativa impulsada por la propia presidencia del cuerpo, que propuso adelantar y destinar la totalidad de los subsidios que anualmente disponen los 257 diputados a entidades sanitarias frente a la pandemia. Unos 32.7 millones de pesos que la Cámara ya aportó al sistema sanitario. Además de haber congelado las dietas y la designación de personal desde diciembre pasado.
Una decisión que corrió en paralelo al reclamo que hizo público el “interbloque de Juntos por el Cambio”. En una carta dirigida a Fernández pidieron construir un fondo de emergencia por 90 días ante la pandemia “con el 30 por ciento de los ingresos de la totalidad de los cargos jerárquicos del Poder Ejecutivo Nacional, Poder Legislativo Nacional y Poder Judicial de la Nación”, y de todos los organismos descentralizados del Estado. Así como invitar a las provincias y municipios a adherir a la medida.
La misiva opositora que difundieron el lunes no lleva las firmas ni los nombres de los presidentes de las bancadas. Es que la decisión se tomó en medio de una dura discusión interna, donde prevaleció el ala más dura contra el Gobierno y que agitó el cacerolazo del lunes por la noche. “Los más duros por la difusión de la carta, que no tenía el consenso de todos los bloques, fue la Coalición Cívica, que acusó a los que la difundieron de hacer “seguidismo a (Patricia) Bullrich’”, reconocieron en el interbloque a PáginaI12.
“Hoy debemos acompañar de manera solidaria, colectiva y sin personalismos. Querer sacar ventajas individuales a costa de uno de los distritos que nos toca gobernar es inmoral y éticamente reprochable”, señalaron los dirigentes de la CC-ARI en un comunicado que buscó despegarse de la actitud asumida por algunos de sus socios políticos. De todas maneras, en JpC dicen que se “apaciguaron” las diferencias. Como muestra, afirman, el interbloque de diputados presentó “por mesa de entrada” una nota dirigida a Massa para que haga de “mandadero” y le entregue la carta al Presidente.
Ahora, el recorte que impulsa Massa en la Cámara baja alcanzaría al 40 por ciento de las dietas de todos los diputados nacionales durante cinco meses. Una determinación, que “se adoptará con la venia de la Casa Rosada”, y el propio presidente con quien Massa “está en contacto directo”, como confiaron a este diario desde la conducción del bloque del Frente de Todos.