La actividad de los odontólogos es una de las tareas médicas de más alto riesgo de contagio ante la pandemia de coronavirus. Según aseguró a Página 12 Cristina Tula, presidenta de la Asociación Odontológica Argentina (AOA) "estamos más expuestos a la transmisión del virus debido a que trabajamos en la región de la boca y los tejidos que la rodean, además la distancia de trabajo suele ser menor al metro de distancia establecido".
Aunque los odontólogos aún atienden casos de urgencia, muchos consultorios privados debieron cerrar sus puertas ante la imposibilidad de adquirir los insumos necesarios para la protección: "En la provincia de Buenos Aires ya nos quedamos sin insumos para atender y la atención está recayendo en el sistema público, necesitamos la ayuda del Estado para acceder a esos insumos", afirmó en diálogo con este diario Ariel Vergara, presidente del Consejo Superior Colegio de Odontólogos de la Provincia de Buenos Aires (Cosucoba).
"Los odontólogos trabajamos con equipamientos que generan aerosoles que se mantienen en el aire entre treinta minutos y tres horas. Estos aerosoles contienen saliva que puede tener el virus y es la principal vía de transmisión en odontología", explicó Tula mientras que el presidente de Cosucoba detalló que "la famosa jeringa de agua y aire que se aplica en la boca del paciente es potenciadora de la transmisión".
Los dos coincidieron en que la actividad odontológica es una tarea de "alto riesgo": "Podemos inhalar directamente el virus por la cercanía al paciente o, indirectamente, al tocar una superficie que ha sido contaminada", aseguró la presidenta de AOA. Por su parte, Vergara agregó que "no es un riesgo solo para nosotros sino para cualquier paciente. Si no tenemos la protección necesaria exponemos a la población".
Frente a la cuarentena por el avance del coronavirus, los odontólogos comenzaron a tratar solo casos de urgencia: "No estamos manteniendo la atención en el consultorio odontológico de manera habitua,l pero sí atendemos las emergencias", explicó la odontóloga que agregó que "además de aliviar el dolor, el riesgo de infección y los síntomas de nuestros pacientes, buscamos disminuir la demanda en los centros asistenciales ocupados en esta emergencia".
Para atender los casos de urgencia existe un protocolo establecido. Tanto la AOA como Cosucoba dispusieron diferentes vías de comunicación mediante redes sociales y WhatsApp donde los pacientes pueden realizar una primera consulta: "Se hace una consulta telefónica para ver los riesgos según su historial: si la persona presenta una afección urgente y viajó a una zona de riesgo o estuvo en contacto con gente con coronavirus, la atención se le da igual con todos los insumos de protección y luego se da alerta de caso sospechoso", explicó Vergara.
Por su parte, la presidenta de la Asociación detalló una serie de recomendaciones como "evitar el uso de instrumental que genere aerosoles, lavarse las manos, tanto el paciente como el odontólogo, y contar con la indumentaria adecuada: guantes, barbijo, lentes protectores oculares, visera, camisolín y botas descartables".
Según las estimaciones de Cosucoba, el kit de insumos necesarios para una completa protección a la hora de la atención odontológica cuesta cerca de 2.500 pesos. El kit incluye el ya conocido barbijo respirador 3M, recomendado para la prevención del coronavirus, barbijos comunes, guantes descartables y camisolín entre otras cosas.
Hasta el momento fueron los odontólogos privados los que se encargaron de comprar sus propios insumos: "El problema real es que ya no tenemos los insumos para atender con protección, por eso hace unas semanas estamos pidiendo diferentes ayudas para paliar la situación", detalló el presidente del Consejo.
En la provincia de Buenos Aires muchos consultorios privados comenzaron a cerrar sus puertas ante la imposibilidad de solventar la compra de los kits: "No podemos obligar a los privados a que atiendan si no tienen estos insumos. Los consultorios cierran y toda esa demanda va a parar al sector público, donde en muchos lugares tampoco se cuenta con los insumos".
Hace unas semanas, el Cosucoba ya había advertido que la actividad odontológica debía ser considerada de "alto riesgo", ahora, desde el Consejo piden al Estado que se exima al sector del pago de impuestos incluidos en el precio de los insumos básicos, además de la provisión del sector público: "Queremos asegurar el correcto ejercicio de la odontología en resguardo de la salud de la población", aseguró el Consejo en un comunicado difundido este lunes.
Además de esta situación, en el comunicado se explicitan las condiciones en que la mayoría de los odontólogos realizan sus actividades: "denunciamos desde hace años que estamos trabajando a cambio de salarios de hambre, precarizados, poli-empleados, yendo del hospital a la clínica y de la clínica al consultorio para llegar a fin de mes". Desde enero de este año, varias obras sociales adeudan dinero a los trabajadores: "no hemos recibido el pago de lo que trabajamos desde enero a la fecha de parte de IOMA, Galeno, Omint, Medife, entre otros que contratan nuestros servicios", denunciaron.
Informe: Santiago Brunetto