Cuando el ministerio de Salud de Mendoza informó hoy la muerte de un hombre de 44 años, la estadística lo ubicó como la víctima número 56 de la Covid-19 en la Argentina, la cuarta que suma la provincia cuyana y, además, como la segunda persona más joven en fallecer en el país por la enfermedad. Su juventud no deja de ser llamativa, dado que el coronavirus se considera de riesgo en mayores de 60 años.
De hecho, la juventud de la víctima 56 del coronavirus en la Argentina solamente es superada por los 41 años que tenía el hombre de La Matanza fallecido días antes en una clínica porteña. El único antecedente del caso mendocino era su obesidad. Se ignora si era mórbida o solo se trataba de sobrepeso, lo cual no necesariamente debía complicar su estado general, aunque fuera un factor de riesgo.
El hombre había llegado de España el 23 de marzo, previa escala por Santiago de Chile, y el 27 fue internado en el Hospital del Carmen por haber presentado fiebre, disnea y dolor de cabeza. El 30 de marzo fue llevado a terapia intensiva y al día siguiente se confirmó el diagnóstico de coronavirus.
Al mismo tiempo, su esposa, quien había viajado con él a España, también fue internada en el mismo hospital, y se halla aislada y en buen estado de salud. Mendoza acumuló 31 casos de Covis-19, de los cuales 26 son importados. Cinco de los casos son por contacto estrecho con alguien que vino del extranjero. La provincia tiene, además, tres personas dadas de alta y hay 23 casos que esperan los resultados de sus testeos.