La Secretaría de Desarrollo Organizacional del Ministerio de Salud de Salta y la Escuela de Educación Técnica N° 3106 Ingeniero Ricardo Maury, de la localidad de Campo Quijano, articularon acciones y se pusieron a confeccionar portasueros para el Centro de Recuperación Covid-19 de Limache. Ya se entregaron 50 unidades y tienen el objetivo de hacer un total de 200 portasueros. 

Además, la escuela confeccionó máscaras de protección facial que fueron entregadas en el Hospital Público Doctor Francisco Herrera, Campo Quijano, y al Centro de Salud de la localidad de San Luis.

El director de la Escuela 3106, Rafael Sangari, dijo a Salta/12 que esta acción es el aporte de la institución ante el contexto de pandemia. “Tenemos recursos humanos y equipamiento para hacerlo y lo estamos haciendo”, afirmó.

La comunidad educativa de la EET de Campo Quijano está llevando a cabo distintas acciones para colaborar en la emergencia sanitaria. Por un lado, la fabricación de portasueros metálicos para abastecer al Centro de Recuperación que se habilitó en el edificio del Centro de Convenciones del barrio capitalino de Limache. A la par, siguen haciendo máscaras de protección facial con impresoras 3D.

Los portasueros metálicos comenzaron a hacerse la semana pasada y ya se entregaron 50 unidades al Centro de Convenciones. De acuerdo a lo dialogado con el Ministerio de Salud, el objetivo es hacer un total de 200. Sangari dijo que tratan de confeccionarlos “lo antes posible porque son situaciones de emergencia” y que por eso, también trabajaron durante el fin de semana. 

Desde la Secretaría de Desarrollo Organizacional dieron los insumos para que un equipo de docentes, alumnos y ex alumnos realicen los portasueros. Los trabajos fueron ejecutados por los jóvenes Franco, Luis y Ezequiel Huaranca, Alex Llanos, Enzo Tejerina y Sergio Soriano con la colaboración y supervisión de los profesores Segundo Villarroel, Enrique Cruz, Gerardo Tolaba y Nicolás Flores.

Sangari contó que la secretaria de Desarrollo Organizaciónal, Celina Caro, “se puso en contacto” y “nos dio la oportunidad de hacer los portasueros. Nos ayudó con los materiales”. El docente contó que, dentro del aislamiento social, preventivo y obligatorio, acataron todas las medidas de seguridad en el establecimiento educativo. “Todos tienen el permiso para hacer ese trabajo y se garantizaron dentro de la escuela todas las condiciones de aislamiento”, subrayó.

Con respecto a la confección de máscaras de protección facial, el director relató que trabajando con las siete máquinas impresoras que tiene el establecimiento se entregaron 100 máscaras al Hospital Público de Campo Quijano. Sostuvo que se “acompaña a la institución que va necesitando”.

También entregaron máscaras al Centro de Salud de San Luis y están preparando 200 nuevas máscaras, esta vez destinadas al personal del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de Salta (CIF). Según Sangari, cada acción emprendida "tiene que ver con la disponibilidad de insumos". "Una fundación nos dio los rollos para las viceras de las máscaras y luego se buscó la parte de abajo que es solo acetato", describió. 

Sangari contó que para la recolección del acetato fueron ayudados por el técnico del INTI, Manuel Zambrano, y varios vecinos que acercaron plásticos de botellas, entre otras cosas. 

El docente se mostró agradecido con los profesionales de la institución que decidieron colaborar y relató que algunos maestros "se llevaron las impresoras a sus hogares y sin romper la cuarentena confeccionaron las máscaras". Agregó que también hay profesores que se encuentran en el grupo de riesgo y que con la intención de colaborar, realizan las gestiones necesarias desde sus casas. "Hay mucha gente que hace un trabajo", señaló. Y dejó un mensaje: "Pareciera que las soluciones no se las ve, pero lo único que entiendo es que si no estamos juntos para esto, sería muy difícil".